Javier López Madrid contrata una asesora para lavar su imagen ante su otoño más complicado: Elisa Pinto, Villarejo y la corrupción
Martín Alegre
El otoño se presenta sombrío para Javier López Madrid, íntimo de Felipe VI y compañero de yoga de la reina Letizia (el famoso compiyogui). Aparte de los casos de corrupción que le salpican, está el sórdido asunto de la doctora Pinto, "la médico esa que yo apuñalé", según dice Villarejo en una conversación intervenida. Ante este panorama, López Madrid ha decidido contratar a una asesora de imagen. Y sabemos quién es.
El yerno de Juan Miguel Villar Mir, presidente de la constructora OHL, ha sido absuelto en el caso de la salida a bolsa de Bankia,pero está citado por el juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, para declarar el próximo día 22 de octubre en calidad de investigado (imputado), por la adjudicación en 2007 de las obras del tren de Navalcarnero.
Ese mismo día, también deberá declarar como testigo el ex secretario general del PP madrileño Francisco Granados, muy amigo de López Madrid, hasta el punto de que Granados disfrutaba en verano de uno de los yates del empresario para sus vacaciones.
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Un tercer personaje de la trama, el empresario David Marjaliza, declaró en febrero pasado que en una cena compartida con Francisco Granados y López Madrid, el que fuera consejero con Esperanza Aguirre le reclamaba al yerno de Villar Mir un millón de euros, en concepto de comisión por la adjudicación de las obras del tren de Navalcarnero al grupo OHL.
No es el único frente que se le viene encima al que fuera uno de los personajes de la jet set económica y social de otros tiempos, hasta que las tramas de corrupción le salpicaron y fue imputado en distintos casos relacionados con la financiación del Partido Popular. Recordemos que López Madrid, investigado también por el pago de presuntas comisiones pagadas al expresidente madrileño Ignacio González, fue arrestado en 2017 por la Guardia Civil. Después de pasar una noche detenido, el juez Eloy Velasco le dejó en libertad bajo fianza de 100.000 euros. Contaban entonces sus allegados que esa noche aciaga la había pasado llorando amargamente.
"La médico esa que yo apuñalé"
Pero sus frentes judiciales no parecen tener fin. La pasada semana se ha sabido, que López Madrid y el ex comisario jubilado José Manuel Villarejo, en prisión provisional desde 2017, están a un paso del banquillo por razones bien distintas a las mencionadas. El Juzgado de Instrucción número 39 de Madrid, que lleva el caso del presunto apuñalamiento de Villarejo a la doctora Elisa Pinto en 2014, supuestamente por encargo de López Madrid, ha considerado que "existen indicios suficientes de la participación" de ambos en los hechos y atribuye a López Madrid un delito de amenaza y otro de acoso, y a Villarejo uno de lesiones. La condena en el caso del comisario podría ser de 17 años de prisión.
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La propia doctora identificó a Villarejo en una rueda de reconocimiento en 2017, después de lograr que se reabriera el caso, archivado provisionalmente en marzo de 2016. Esta misma semana, el diario El Mundo desvelaba un audio de Villarejo dentro del sumario caso Kitchen, en el que el ex comisario habla con otra persona diciendo, literalmente: "La médico esa que yo apuñalé".
En vista de este sombrío panorama judicial y mediático, López Madrid ha decidido contratar a una asesora de prensa, para iniciar una campaña que le ayude a lavar su maltrecha imagen. El empresario ha pasado todos estos años sin hacer ninguna declaración, aunque al destaparse los primeros indicios de las supuestos delitos, contaba con el apoyo de muchos amigos, incluidos Felipe y Letizia. La entonces princesa le animaba en un mensaje que se incluye en un sumario a que no haga caso de un artículo crítico sobre él en La Otra Crónica de El Mundo: "Sabemos quién eres, sabes quiénes somos. Nos conocemos, nos queremos, nos respetamos. Lo demás, merde", le escribía su compañera de yoga. También cuenta López Madrid con el apoyo manifiesto de Mónica Sánchez Navarro, casada con Ricky Fuster, uno de los mejores amigos de Felipe de Borbón.
La ofensiva periodística de López Madrid ha empezado ya. Se le presenta desde algún medio como víctima de ka doctora Pinto y no como su acosador. Pero de momento solo habla "su entorno" o se asegura que "pasa un mal momento", pero él no habla directamente.
Informalia ha podido saber que su nueva asesora de prensa es María Victoria Cristóbal Araujo, que en julio de 2014 era concejala del PP en el Ayuntamiento de Majadahonda. Antes había ocupado el puesto de directora de la Agencia Madrileña para la Emigración, además de asesora en las consejerías de Francisco Granados. Llegó a ser estrecha colaboradora del ex concejal que pasó casi tres años en prisión por el caso Púnica.
Vicky, como la llama sus amigos, fue expulsada de FAES por José Marçía Aznar. El expresidente no la quería en la fundación de ideas vinculada al PP. Eso fue poco antes de que estallara el escándalo del caso Púnica, porque corrían rumores en la sede del PP, de que "Granados le había puesto coche y piso a Victoria, una amiga suya muy especial", según publicaba en su día El Confidencial.
En julio de 2014, Victoria Cristóbal llamó a su amigo Granados para contarle su disgusto por quedarse fuera de un proyecto con la embajada de Rusia, "porque a Aznar le han contado lo del piso, lo del coche, todo".
"Estoy en una posición de indefensión... ¿Qué puedo hacer, Paco? Joder, que al final a mí me han jodido la vida, porque claro, me han puesto una cruz imposible de levantar, imposible, imposible", decía en unas conversaciones, que constan en un sumario, con el que fuera concejal de Esperanza Aguirre.
Parece que López Madrid vuelve a recurrir al círculo de su amigo Granados para su contraofensiva en la prensa. Pero, ¿ha acertado con una asesora "contaminada por los escándalos del PP más corrupto?
"Puta no te acerques a Javier López Madrid"
Tanto López Madrid como Villarejo niegan las acusaciones, y el ex comisario afirma que no ha trabajado para el empresario. Pero Elisa Pinto pide 22 años de cárcel a Villarejo y López Madrid por amenazarla para que retirara una denuncia por acoso. La dermatóloga sostiene que fue víctima de hostigamiento, y seguimientos hacia ella y sus hijos, y señala como responsables al empresario y al ex comisario. Pinto ha solicitado que se condene a 22 años de prisión al excomisario José Villarejo y al empresario Javier López Madrid por amenazarla y hostigarla para lograr que retirara una denuncia por acoso, en un escrito donde recuerda que llegó a ser apuñalada.
Pinto, acusación particular en la causa, ha presentado ante el juzgado de instrucción número 39 de Madrid un escrito, al que ha tenido acceso Efe, donde les atribuye delito continuado de amenazas, lesiones, cohecho y homicidio en grado de tentativa, subsidiario de lesiones agravadas. La Asociación Clara Campoamor, que ejerce la acusación popular, pide 17 años de prisión para ambos.
La defensa de la doctora Pinto expone que a principios de 2013 comenzó a "recibir regalos, mensajes subidos de tono, encuentros deliberadamente casuales", fotografías sexuales y largas llamadas, lo que le provocó "angustia y ansiedad" que la llevaron a amenazarle con una denuncia.
Villarejo, según la dermatóloga, fue contratado por López Madrid en septiembre de 2013, para hostigarla y "evitar que denunciara" y, cuando ya lo había hecho, conseguir "los medios policiales necesarios para desacreditar su denuncia logrando que se archivara".
Elisa Pinto, afirma que siguió recibiendo "llamadas y mensajes amenazantes" de López Madrid o de personas contratadas por él, e incluso denunció que "unos hombres" entraron en su terraza cuando ella no estaba.
"Puta no te acerques a Javier López Madrid, me vale madres llevarte por delante" o "vamos a pinchar a tus hijos" fueron algunos de los mensajes que recoge la dermatóloga, quien recuerda el episodio en que ambos fueron a su consulta, "la hostigaron para que no denunciara" y mantuvieron una conversación "planificada de antemano", que grabaron para usar "como prueba" contra ella.
La dermatóloga relata dos agresiones, una en enero de 2014, cuando un individuo entró en su coche y le causó "un corte con objeto punzante mientras decía 'estás indefensa'"; y otra en abril cuando, al bajarse de su vehículo, "el agresor dijo: 'López Madrid quiere que cierres la boca'" y "le asestó un tajo en el abdomen por encima de la ropa".
Pinto, que identificó a Villarejo como este segundo agresor, acusa a López Madrid de haber tenido "un trato de favor" por parte de varios excomisarios, uno de ellos Enrique García Castaño, también imputado en el caso Tándem.