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Luis Miguel Rodríguez: "A Pedro J. Ramírez le jode que haya hecho feliz a su mujer"


    Martín Alegre

    "Ni Desguaces La Torre está en quiebra, ni el camión de mi colección, en el que Franco se desplazaba con sus hombres al frente durante la Guerra Civil, ha sido vendido por 3.000 Euros, como publica medio de Pedro J. Ramírez", asegura indignado al otro lado el teléfono Luis Miguel Rodríguez, ex de Ágatha Ruiz de la Prada y propietario de la empresa de desguaces más importante de Europa.

    "¿Pero qué le pasa a Pedro Jota?", se pregunta el empresario, novio durante casi dos años de la que fuera esposa del director de El Español. "Le jode que haya estado con su mujer y que Agatha haya sido muy feliz conmigo. La hice sonreír, le cambié la vida. Con la tristeza que tenía de haber vivido con ese tío y la felicidad que disfrutó al encontrarme...", insiste Luis Mi.

    El magnate del negocio de chatarra en España conoció a Ágatha poco después de que Pedro J. Ramírez anunciara a su esposa que estaba enamorado de otra mujer, la abogada Cruz Sánchez de Lara, y que quería el divorcio. El periodista y la diseñadora se habían casado sólo seis meses antes, después de convivir 30 años juntos y ser padres de dos hijos, como contó en primicia este portal.

    Por su parte, Luis Miguel Rodríguez, también divorciado y padre de dos hijas, había terminado amistosamente su relación con Carmen Martínez-Bordiú y fue la propia nieta de Franco quien le presentó a Agatha, que en aquel momento estaba muy en baja forma física y anímicamente, devastada por su inesperada ruptura.

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    Cuando empezaron a salir, todo indicaba que la relación duraría muy poco, no tenían nada en común. Y sin embargo pasaba el tiempo y cada vez se les veía más compenetrados y contentos. Las supuestas infidelidades del empresario, al que le gustan las mujeres tanto como su trabajo, pusieron punto final al amor, pero no a su amistad. Luismi sigue soltero y aparentemente sin compromiso, y Áatha vive una feliz relación con Luis Gasset, un experto en arte y antigüedades.

    Se llevan tan bien que en cuanto Luismi vio publicado el artículo de El Español, en el que hablaba de su ruina y de la venta del coche de Franco por una cantidad ridícula, se lo hizo llegar a Agatha. "Le ha mandado la información a La Flaca (como la llama cariñosamente), y me ha llamado enseguida, estaba indignada. Yo la quiero mucho y tengo muy buena relación con ella. Es una buena persona y yo no regaño con nadie", explica.

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    La puesta a la venta de los coches históricos almacenados en una nave-museo de Desguaces La Torre, ha sido un éxito: "Hemos vendido todo, excepto la colección de coches de caballos y el coche donde José María Aznar sufrió el atentado de ETA. En total, hemos sacado 2.700.000 euros", aclara el empresario de desguaces.

    Deuda de 38 millones

    En cuanto la deuda que tiene pendiente con Hacienda, en torno a 38 millones de euros, Luis Miguel Rodríguez negocia con la Agencia Tributaria solventarla con pagos aplazados. "Seguramente liquidaré todo en este mes de setiembre, estamos vendiendo una propiedad en Parla valorada en unos 23 millones de euros, y todo está bajo control", reitera. "Mi empresa no solo no está en quiebra sino que tiene 10 millones de euros en la cuenta. El camión se ha vendido en unos 20.000 Euros, no 3.200 como dijeron", remata.