Camila, gran amor de Humberto Janeiro pero 'repudiada' por sus hijos

Humberto Janeiro murió este domingo a los 76 años tras varias semanas ingresado en el Hospital Universitario de Jerez. El padre de Jesulín de Ubrique sufrió un fallo multiorgánico, derivado de unas complicaciones motivadas por una fuerte infección en su cuerpo. A su lado siempre, Camila Naranjo, su compañera sentimental desde hace muchos años.

La relación de Camila y Humberto nunca ha sido fácil. El mayor escollo eran los cuatro hijos de Janeiro, quienes no tenían relación con ella. Nadie les vio juntos en estos días de hospital. Naranjo siempre respetó el derecho de los hijos de Humberto a entrar en la UCI en primer lugar.

Camila es una mujer muy discreta que supo mantenerse siempre en segungo plano, entregada en cuerpo y alma al padre del diestro. También le ayudaba económicamente, puesto que el patriarca de los Janeiro tan solo contaba con una pequeña pensión.

Ambos residían en Prado del Rey, el pueblo en el que residían hasta que Humberto fue hospitalizado a finales de julio. Allí era un hombre muy querido, un 'bonachón' que tenía relación con todo el mundo, según asegura un vecino, José María, a La Razón: "Venía algunas tardes a tomar café y se enrollaba con la gente con mucha simpatía. Le gustaba contar chistes y nunca le escuchamos hablar mal de sus hijos. Eso sí, se quejaba de que no venían a verle…".

Los comentarios sobre Camila también son muy positivos. Fuentes cercanas a Humberto hablan maravillas de ella: "Esa mujer le ha hecho mucho bien a Humberto. Ha estado a su lado en todo momento. Imaginamos cómo se sentirá en estos momentos. Se ha muerto el gran amor de su vida, su dedicación hacia ese hombre era absoluta", cuentan.