Bill Clinton, en el punto de mira: un testigo lo sitúa en la isla privada del pedófilo Jeffrey Epstein

El polémico caso del pedófilo Jeffrey Epstein vuelve a estar en boca de todos, volviendo a poner a Bill Clinton en el punto de mira. Un testigo ha asegurado haberle visto en la isla caribeña privada del magnate, Little Saint James, donde tuvo lugar el entramado de explotación sexual a menores. El expresidente estadounidense ya negó su relación de amistad con el empresario, que se quitó la vida este verano en su celda de Nueva York, cuando salió a luz el escándalo.

Steven Scully, el ex empleado de Jeffrey Epstein que se encargaba de las comidas del empresario, ha confesado en el recién estrenado documental Filthy Rich (Asquerósamente rico) de Netflix que vio al ex mandatario sentado en el lujoso porche de la mansión, aunque asegura no haber visto ninguna actividad ilícita. Clinton, según The Sun, viajó hasta la isla en repetidas ocasiones, durante la misma época en la que Epstein ya abusaba de decenas de menores.

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Clinton ya desmintió su implicación con el entramado sexual del magnate el pasado año, cuando el empresario fue arrestado en Nueva York tras ser acusado de montar una red de tráfico sexual: "No ha hablado con Epstein en una década y nunca ha estado en Little Saint James", asegurando que no sabía nada "de los terribles crímenes de Jeffrey Epstein" ya que solo habían mantenido contados encuentros, como una en su oficina de Harlem y otra en la mansión de Epstein en Nueva York.

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La confesión del empleado coincide con una de las presuntas víctimas más famosas hasta la fecha, Virginia Roberts Giuffre, que aseguró en una de sus sonadas entrevistas haber visto al ex mandatario cenar con Epstein; con su amante y compinche Ghislaine Maxwell; y dos mujeres más en la isla: "Lo vi caminar hacia la oscuridad con dos chicas guapas en cada brazo", aseguró. Además, en enero de este año también se destaparon unas fotos de Clinton junto a Maxwell en el avión privado de Epstein. Junto a ellos también se encontraba Chauntae Davies, una masajista que también se señaló como víctima de Jeffrey.