El príncipe Harry disfruta de su nuevo pelo alborotado tras someterse a un presunto tratamiento contra la calvicie

El príncipe Harry lleva siendo noticia desde hace unos años por su más que evidente progresiva pérdida de cabello. Para ponerle remedio al asunto, el marido de Meghan Markle se habría sometido el pasado mes de febrero a un tratamiento capilar que ahora estaría arrojando satisfactorios resultados. En sus últimas apariciones mediante videollamadas debido a la emergencia del Covid-19, se ha podido comprobar como su pelo está cogiendo mucha más fuerza.

Ese mes el duque de Sussex copó los titulares de los principales tabloides británicos, como The Sun y Daily Mail, cuando fue captado saliendo de una clínica especializada en este tipo de problemas, situada en en el londinense barrio de Mayfair y llamada Philip Kingsley Trichological Clinic de Londres. Se habría sometido a un tratamiento de redensificación del cabello que estaría valorado en nada más y nada menos que 5.000 dólares, tal y como aseguró The Sun.

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Bien es cierto que la calvicie del nieto de la reina Isabel II se ha duplicado desde que contrajo matrimonio con Meghan Markle hace ya dos años y, sobre todo, desde de la llegada del pequeño Archie al mundo. "Se puede apreciar una aceleración en el patrón de la caída de cabello en los últimos meses", aseguró el doctor Shahmalak en el Daily Express este verano.  La calvicie le viene de casa, pues en en los últimos años su hermano el príncipe Guillermo comenzó a perder el cabello a la edad de 20 años.

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Pasados tres meses desde el presunto injerto de pelo, el príncipe Harry ya estaría apreciando los resultados cada vez que se echa un vistazo frente al espejo de su flamante y temporal casa de Los Ángeles, donde vive con Meghan Markle y el pequeño Archie desde que a finales de marzo oficializaran su salida de la corona británica y comenzaran a ser económicamente independientes. Prueba de ello, las últimas videollamadas del hijo del príncipe Carlos en las que aparece con el pelo alborotado.