¿Por qué Florentino Pérez sentó a Aznar y Bartomeu juntos en el palco del Bernabéu?

El Clásico que ganó el Real Madrid al Barça por 2 goles a 0 reunió como es habitual a políticos, empresarios y demás privilegiados en el palco del Santiago Bernabéu, un lugar extraordinario para hacer lobbying, networking y dejarse ver. Los ilustres invitados constituyen la llamada escolta social de Florentino Pérez, que no siempre alinea a los mismos y que depende, por ejemplo, de quién ocupa determinados cargos institucionales.

En esta ocasión había especial morbo por ver el saludo entre Josep Maria Bartomeu, presidente del Barcelona, y cercano al independentismo, y el ex presidente del Gobierno José María Aznar, claramente alejado de los separatistas. Disgustos y alegrías deportivas aparte, según para quién, Bartomeu estaba preocupado: como ya contamos en exclusiva, tenía que acudir al juzgado para formalizar el proceso de divorcio de la madre de sus hijos, de la que lleva casi dos años separados. No les vimos ponerse malas caras pero vivieron el partido hombro con hombro. ¿Quién les puso juntos? Al lado del ex presidente del PP estaba su mujer, Ana Botella, también de corazón blanco. A juzgar por las expresiones faciales de la ex alcaldesa, lo pasó fatal en algunos momentos del encuentro aunque al final una plácida sonrisa reflejaba el triunfo su equipo frente a su eterno rival.

Al otro lado de Bartomeu estaba por supuesto Florentino. y a la derecha de del presidente se sentó Isabel dDíaz Ayuso Esas primeras filas contaban también con la presencia de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid y madridista confesa. El alcalde Almeida, atlético, no estaba pero sí la número 2 del municipio Begoña Villacís. También vimos a José Bogas, presidente de Endesa; José Manuel Rodríguez Uribes, ministro de Cultura y Deporte; Irene Lozano, presidenta del Consejo Superior de Deportes; Elena Salgado, ex vicepresidenta del Gobierno; Eduardo Fernández de Blas, vicepresidente segundo del Real Madrid; Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español; y Mattias Grafström, secretario general adjunto de la FIFA. Mario Vargas Llosa y su novia Isabel Preysler pusieron la nota literaria y rosa al conjunto.

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En asientos posteriores se encontraban varios ex ministros del PSOE y el PP. Por parte socialista estaban Mariano Fernández Bermejo, exministro de Justicia, y Beatriz Corredor, exministra de Vivienda y recién nombrada presidenta de Red Eléctrica Española. En lo que respecta al lado popular, acudieron José María Michavila, exministro de Justicia con Aznar, y José Manuel García-Margallo, exministro de Exteriores con Mariano Rajoy.

Entre los empresarios vimos a Antonio Garamendi, presidente de la CEOE; Ignacio de Colmenares y Brunet, consejero delegado de Ence; Íñigo Meirás, consejero delegado de Logista; y Fernando Ruiz, presidente de Deloitte.

Quien no quiso presenciar el encuentro desde el palco fue Cristiano Ronaldo, que rechazó la invitación de Florentino para ver el match desde la zona noble del estadio. El jugador de la Juventus, que aprovechó la suspensión de su partido en Italia por la amenaza del coronavirus para animar a su ex equipo, prefirió seguir el partido desde un palco privado con amigos y sin Georgina Rodríguez.