Miguel Bosé se enfrenta a Nacho Palau en marzo en el litigio por sus cuatro hijos
Martín Alegre
Desde México, donde reside con sus dos hijos biológicos, Tadeo y Diego, de 9 años, Miguel Bosé, siempre muy activo en sus redes sociales, felicitó a sus seguidores por el nuevo año con el siguiente mensaje: "A todos, gracias por este año y para el 2020 mucha salud, alegrías, bienestar, serenidad, compromiso, honestidad, coherencia, trabajo, metas, mucho, tregua, conciencia nueva, dignidad, naturaleza, paz y si hay amor, que sea el bueno. Os quiero infinitamente, Miguel".
Un mensaje que podría contener palabras clave como 'tregua', 'conciencia nueva' o 'paz', dirigidas tal vez a Nacho Palau, un artista valenciano que fue su novio durante 26 años y con el que rompió oficialmente en junio de 2018.
Aquella ruptura iba más allá de lo sentimental, ya que Bosé y Palau eran padres de otros dos niños, Yvo y Telmo, hijos biológicos de Nacho Palau, nacidos también por gestación subrogada en Estados Unidos, siete meses después de los dos anteriores. Bosé presentó en repetidas ocasiones a estos últimos niños como hijos propios, diciendo públicamente: "Soy padre de cuatro hijos".
Pero el fin de la relación trajo como consecuencia la división de la familia. Miguel Bosé se fue a vivir a Panamá con sus hijos y más tarde a México, dejando a Nacho Palau en Chelva, el pueblecito valenciano donde al artista vive con su madre. Se separaban de forma dolorosa y traumática los cuatro hermanos, dos y dos, que habían convivido juntos durante ocho años.
Palau demandó a Miguel Bosé, reclamando igual trato familiar y económico para los cuatro niños, una demanda que sigue adelante aunque este verano hubo un acuerdo de medidas cautelares sobre el régimen de visitas de los niños, a fin de que se vean y se reúnan alternativamente con sus padres en épocas de vacaciones. Y así ha sido. Hay constancia de que Tadeo y Diego pasaron unos días con sus hermanos en el pueblo valenciano de su otro padre, Nacho Palau y todo indica que los cuatro volvieron a reunirse en la casa de Bosé en Somosaguas, donde se habían criado juntos durante ocho años.
Pero la demanda de Palau contra el cantante sigue en vigor y la vista está fijada para este marzo de 2020 en un Juzgado de Pozuelo de Alarcón. El artista valenciano defenderá ante el tribunal que, aunque los cuatro hijos tienen una genética diferente, es decir, que biológicamente no son hermanos, hay una filiación afectiva e intencional. Los dos litigantes estuvieron de acuerdo durante ocho años en considerarles sus hijos y hermanos entre sí, y Miguel Bosé no dejaba de repetirlo públicamente y en todas sus entrevistas. Será un litigio polémico que dará mucho que hablar en los medios.
No hay datos fehacientes de cómo han pasado los cuatro niños esta Navidad, ya que el acuerdo entre la ex pareja fijaba que los pequeños estuvieran juntos en vacaciones. Pero en otro mensaje del cantante de hace cuatro días, se le ve acompañado de su madre, Lucía Bosé y dos amigos de siempre, el cirujano plástico Enrique Monereo y de Boris Izaguirre, disfrutando del museo Frida Kahlo de la capital mexicana. En la foto no hay mención ni rastro de los niños. ¿Estarían en Valencia con su otro padre?