Actualidad

Por qué las hijas de Esther Koplowitz y Alberto Alcocer no estuvieron en la puesta de largo de sus hermanas pequeñas


    Martín Alegre

    Koplowitz y Alcocer son dos apellidos que el mundo empresarial y financiero de este país conoce de sobra. Alberto Alcocer es propietario, junto con su primo Alberto Cortina, de Alcor Holding, una sociedad patrimonial dueña del 12,5 % de ACS, la mayor constructora española, y del 21% de la papelera Ence.

    El poderío económico de estas familias, y de los Cortina, convierte a sus integrantes además en personajes importantes de la crónica social. Alberto Alcocer y Esther Koplowitz estuvieron casados entre 1969 y 1990. Se separaron hace más de 20 años, pero sus apellidos irán unidos para siempre gracias a las tres hijas, fruto de su matrimonio: Esther, Alicia y Carmen.

    Sin embargo, son otras hijas de Alberto Alcocer, y por tanto hermanas de las anteriores por parte de padre, quienes protagonizan varias páginas de un reportaje de Hola esta semana. La publicación recoge con gran despliegue la fiesta de puesta de largo de estas jovencitas que cumplen 18 años dentro de uno meses, una celebración que ya adelantábamos en Informalia el pasado 18 de octubre. 

    El espectacular reportaje del semanario sobre la fastuosa puesta de largo de Carlota y Margarita Alcocer Hernández "apenas refleja la verdadera magnitud de la fiesta", cuenta a Informalia uno de los invitados. Alberto Alcocer Torra, de 76 años, nieto del abogado y ex alcalde de Madrid Alberto Alcocer y Ribacoba e hijo del agente de cambio y bolsa José María Alcocer, y uno de los hombres con más fortuna de España, logró que el sábado, 19 de octubre el Teatro Real se trasformara en un paisaje nocturno de una Habana glamurosa y de leyenda. Quiso dar a sus gemelas, que en pocos meses cumplirán 18 años, la mejor fiesta del año. Y la tuvieron. Carlota y Margarita, así como su madre Margarita Hernández, la segunda esposa del financiero y 30 años más joven, estaban guapísimas con sus vestidos de Lorenzo Caprile y su espléndida juventud.

    Los invitados, a la altura de la celebración. Desde grandes financieros de dentro y fuera de España, hasta el embajador de Estados Unidos, Isabel Preysler, Cari y su Miriam Lapique con su marido Alfonso Cortina, además de su hermano Alberto, primo de Alcocer, con su esposa Elena Cué. O Victoria de Marichalar.

    Agatha Ruiz de la Prada y Luis Miguel Rodríguez estaban en la fiesta por la gran amistad que une al empresario de la chatarra con el anfitrión, Alberto Alcocer, amigos desde hace años y aficionados los dos a la caza.

    Ausencias

    Pero también hubo grandes y sonoras ausencias: las de las tres hermanas (de padre) de las jóvenes Carlota y Margarita Alcocer Hernández. Esther, Alicia y Carmen Alcocer Koplowitz, nacidas del matrimonio de Alberto Alcocer y Esther Koplowitaz, no participaron de la noche cubana del Teatro Real, ni se las esperaba.

    Y es que después de 21 años casados, Alberto Alcocer y Esther Koplowitz rompieron en 1969 de forma nada amistosa. La ruptura se produjo casi a la vez que la de su hermana Alicia. Las dos Koplowitz habían empezado a salir con los primos Albertos cuando eran muy jovencitas, se casaron casi al mismo tiempo y los matrimonios vivían en pisos cercanos. Eran dos parejas inseparables.

    Hasta que Alberto Alcocer conoció a la espectacular Margarita Hernández, modelo y secretaria de Javier de la Rosa, uno de los empresarios más conocidos, polémicos y mediáticos de la época. Alberto Alcocer se enamoró perdidamente de aquel bellezón. Esther, su esposa, no perdonó esa infidelidad, el romance siguió adelante y el financiero y la hermosa Margarita se casaron en 1994. Sus hijas gemelas nacieron en 2002.

    Las relaciones entre Alcocer y Koplowitz siguen siendo delicadas después de los años. "Su trato es nulo", cuenta a Informalia una persona del entorno familiar. "Ella nunca le perdonó que al casarse le hubiera quitado a su esposa el control de la empresa que ella y su hermana Alicia habían heredado de su padre y que una y otra hubieran sido durante su matrimonio "mujeres florero" y en la sombra de las finanzas familiares".

    Sin embargo, las hermanas Koplowitz, después de duras negociaciones y pleitos contra sus ex maridos, consiguieron recuperar el control de las empresas y hasta hacerlas más importantes. Esther y Alicia, que se consideró traicionada también por su marido Alberto Cortina, en su llamativa relación con Marta Chávarri, tampoco perdonaron a sus ex maridos que las convirtieran en personajes de portadas escandalosas, tanto de las páginas económicas como de la prensa rosa.

    Pero mientras Alicia Koplowitz no tuvo inconveniente en aparecer en Londres (después de 25 años sin una imagen juntos) con su ex marido Alberto Cortina, en la boda de Pelayo, su hijo menor, en 2105, Esther y sus hijas (arriba, Alicia Alcocer Koplowitz) han marcado distancias infranqueables con su padre Alberto Alcocer, al que han hecho abuelo de cinco nietos (entre las tres hijas).

    Frialdad gélida con su padre y parece que también con sus hermanastras Carlota y Margarita. Esther, a punto de cumplir 49 años, presidenta de Construcciones y Contratas, asistía en Oviedo con su marido Pablo Santos, un día antes de la fiesta del Teatro Real, a la entrega de los premios Princesa de Asturias. Parece que alguien le preguntó allí por la gran celebración que preparaba su padre para la mayoría de edad de sus hermanas menores, pregunta que no contestó, como si no la hubiera escuchado.