Nuevo Seat Ibiza Cupra: subiendo pulsaciones
Jorge Arenas
Casi sin darnos cuenta han pasado ya dos décadas del lanzamiento del primer Seat Ibiza Cupra. Un modelo que nació en 1996 con la vista puesta en los circuitos y que hoy, tras cuatro generaciones y un restyling, llega más completo que nunca. Su motor 1.8 TSI de 192 CV y su cambio manual son la clave. Un coche más purista, pero a la vez más utilizable que nunca.
El Ibiza Cupra 2015 es un modelo diseñado y desarrollado íntegramente en el centro técnico de Seat que, por cierto, está de cumpleaños ya que comenzó su andadura hace justo 40 años. Quiere esto decir que el modelo que tenemos entre manos tiene ADN español, en mayor medida que otros modelos del grupo Volkswagen, lo que le da un punto interesante ya de partida. Pero es que además, este Ibiza Cupra es el más potente de toda la saga, el más cómodo y el que menos gasta (sobre esto último haremos un acto de fe y nos lo creeremos, ya que la marca lo asegura aunque aún no ha facilitado las cifras homologadas).
Nadando a contracorriente
Pero, ¿qué es lo más llamativo del nuevo Cupra? Sin duda, su motor. Mientras todos los fabricantes tienden irremediablemente hacia el donwsizing, este Ibiza rompe con lo establecido y se decanta por un bloque de 1.800 cc, algo que no deja de sorprender, sobre todo si tenemos en cuenta que el propio Ibiza Cupra montaba un 1.4 antes del restyling en esta misma generación. El caso es que el 1.8 TSI entrega ahora 12 CV más de potencia (192 CV) y eleva la cifra de par hasta los 320 Nm. Este último dato, el del par motor, es el que ha obligado a descartar la caja de cambios automática DSG de 7 velocidades, ya que está preparada para soportar valores inferiores a los 250 Nm, como era el caso del anterior Cupra. Así que los más puristas están de enhorabuena, porque ahora sólo se puede optar a un cambio manual de seis velocidades que, además, funciona de forma eficaz.
A pesar de su mayor cilindrada, este motor 1.8 TSI 192 es más ligero que el desaparecido 1.4 TSI 180, lo que ayuda a alcanzar un peso total del conjunto de 1.184 kilogramos (apenas 1 kg más que antes), que se traducen en una mejor relación peso/potencia frente al predecesor. Para quienes quieran conocer cifras concretas, aquí van el 0 a 100 km/h y la velocidad punta del nuevo Ibiza Cupra: 6,7 segundos y 235 km/h. Nada mal.
Pero más allá de cifras concretas, nos interesa hablar de sensaciones. Tras esta primera toma de contacto, que nos ha dado la oportunidad de conducir al límite en un tramo de carretera muy revirada y cerrada al tráfico, nos ha quedado bien claro que este motor es tremendamente mordaz y digno del apellido Cupra. No le pondríamos ni le quitaríamos un solo caballo, sencillamente funciona en perfecta simbiosis con el Ibiza: empuja con contundencia desde abajo, estira bien en la zona alta del cuentavueltas y tiene un sonido deportivo aunque algo menos perceptible de lo que nos gustaría. Quizá un punto más de volumen sería un acierto para hacer la experiencia de conducción más envolvente.
Motor y cambio se alían con un chasis bastante bien afinado, en el que por primera vez existe un sistema de suspensión adaptativa. La pisada es firme y certera, los frenos sobredimensionados aguantan un uso intensivo y el diferencial electrónico XDS se encarga de digerir la potencia al pisar a fondo en los apoyos. Otra novedad es el botón que activa la función Cupra Drive Profile (algo así como un modo sport), que endurece la amortiguación y la dirección, y mejora el sonido del motor. También existe un tarado deportivo del ESP, pero para activarlo hay que ir al menú pertinente, ya que no forma parte de ese botón que comentamos.
Su diseño, una declaración de intenciones
En el apartado de diseño el Cupra destaca por sus paragolpes especificos, su salida de escape trapezoidal situada en el centro, sus nuevas llantas de 17 pulgadas, sus logos ?Cupra? repartidos por el interior y por una mayor calidad percibida en sus piezas. También adopta el sistema de conectividad Full Link para teléfonos móviles.
En definitiva, se trata del Ibiza más potente y tecnológico que ha habido hasta la fecha. Un coche pasional, con una clara vocación deportiva, capaz de sacar el piloto que todos llevamos dentro. Si echamos mano de la lista de posibles rivales y tenemos en cuenta todo lo que ofrece en relación a su precio, se nos ocurren pocas opciones de compra mejores. Hay que tenerlo claro, este Cupra no es un coche cualquiera, está muy lejos de ser un simple Ibiza; es, más bien, un pequeño deportivo muy bien afinado, con nervio y con verdadera ansia por devorar el asfalto.
Disponible ya en los concesionarios, sólo se comercializa con la carrocería SC de tres puertas y su precio de salida es de 21.400 euros. Con descuentos promocionales y financiación de la marca, esta cifra se puede reducir hasta los 17.680 euros.