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Ford Mustang Bullitt: un homenaje a la mítica persecución de la película protagonizada por Steve McQueen
Ecomotor.es
El 17 de octubre de 1968 se estrenaba en la gran pantalla 'Bullitt', la película clásica protagonizada por Steve McQueen y recordada, en gran parte, por la famosa escena de la persecución policial -al final de la noticia- por las calles de San Francisco a bordo de un Mustang GT fastback para dar 'caza' a dos asesinos huidos en un Dodge Charger.
Una secuencia mítica a la que la firma del óvalo ha querido rendir tributo por su 50 aniversario presentando el Mustang Bullitt de edición limitada. Este 'pony car' atesora un motor gasolina de 5.0 litros V8 que desarrolla una potencia de 475 caballos y que permite al vehículo alcanzar una velocidad máxima de 262 kilómetros por hora, sincronizado con una transmisión manual cuya palanca de cambios tiene forma de bola blanca como guiño al modelo original. Incluye, además, un sistema de escape de válvula activa de serie, y ha sido preparado para dotar al modelo de un burbujeo característico.
Respecto al equipamiento de serie, incluye un panel de instrumentos completamente digital de 12 pulgadas, idéntico en función al equipado en el nuevo Mustang que sale a la venta en toda Europa a finales de este año, pero con una pantalla de bienvenida exclusiva para el Bullitt que arranca en verde con una imagen del coche en vez del icónico pony.
"Este nuevo Bullitt es, igual que Steve McQueen, genial sin esforzarse", afirma Darrel Behmer, jefe de diseño de Mustang. "Como diseñador, este es mi Mustang favorito: sin franjas, spoilers o placas. No necesita gritar nada, es simplemente genial".
Las opciones de color exterior se limitan a Negro Sombra y el clásico Verde Oscuro Highland, igual que en la película. Otros detalles que rinden tributo al coche conducido por McQueen son sutiles detalles cromados alrededor de la parrilla y las ventanas frontales y llantas clásicas de aluminio de 19 pulgadas. El coche reduce al máximo la presencia de emblemas tanto en el interior como en el exterior. Tan solo la falsa tapa del depósito con el logo Bullitt en la parte central trasera se puede ver desde el exterior.
¿Qué fue de los originales?
La firma estadounidense explica que para el rodaje de Bullit se utilizaron dos Mustang GT fastback idénticos. Tras finalizar el rodaje, ambos coches tomaron caminos separados: el vehículo conducido por McQueen fue vendido por Warner Bros a un comprador privado. El otro, utilizado en gran parte de los saltos, incluida la mencionada escena de la persecución, fue enviado a un desguace. Esa unidad apareció en Baja, California, a principios de 2017, pero la otra se había perdido. Hasta hoy.
Sean Kiernan, propietario del coche, lo heredó en 2014 de su difunto padre, Robert, que lo había comprado en 1974. Para cumplir con el sueño de su familia, Sean se puso en contacto con Ford y ambas partes trabajaron conjuntamente para presentar a esta auténtica estrella de cine junto con el nuevo Mustang Bullitt en el NAIAS 2018 de Detroit.