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Nace el primer Ferrari eléctrico sobre la base de un 308 GT de los años 70

    Ferrari Eléctrico.

    Jorge Arenas

    Sustituir un motor V8 de gasolina por uno eléctrico en un Ferrari no es nada usual, pero sí posible. En Estados Unidos alguien se ha atrevido a llevar a cabo esta transformación sobre la base de un Ferrari 308 GTS. El resultado es espectacular.

    Ferrari no es precisamente una marca que suela hacer experimentos con sus modelos. La firma italiana, por lo general, no se apunta a las modas que van llegando al mercado. Tienen las ideas bien claras: sus coches deben continuar la herencia de la marca, con una imagen claramente deportiva y unos motores salvajes y potentes, de esos que aúllan en la parte alta del cuentavueltas.

    Cierto es que uno de los últimos modelos en aparecer, el 488 GTB, recurre a un propulsor algo más pequeño que el de su predecesor (458 Italia), que además está sobrealimentado en vez de ser atmosférico. Podríamos decir que sí ha entrado en el camino del downsizing o más bien del rightsizing, que son dos tendencias muy actuales y alejadas de lo tradicional. Pero por lo demás, no se conoce ningún Ferrari con carrocería SUV (al menos de momento) ni que recurra a energías alternativas para moverse. Recordemos que marcas como Bentley o Maserati ya han pasado por alguno de estos aros, y otras como Lamborghini tienen pensado hacerlo en muy poco tiempo.

    De coche de los 70 a eléctrico

    Precisamente por ello, por esa imagen de autenticidad que tanto tiempo lleva forjándose a fuego la firma del cavallino, nos llama especialmente la atención una noticia que llega de EEUU, donde una empresa dedicada a convertir coches con motor térmico en eléctricos, ha hecho lo propio con un Ferrari. Y no con uno cualquiera, sino con un 308 GTS de los años 70, lo que resulta aún más extravagante. Esta transformación es obra de un pequeño taller, que nada tiene que ver con la firma italiana, pero no por ello deja de ser sorprendente.

    Electric GT, que así es como se llama esta empresa, rescató el Ferrari 308 GTS de una muerte casi segura, ya que el deportivo había sufrido un incendio que había dejado maltrechas ciertos componentes como el motor y parte de la carrocería. Sin embargo, el modelo merecía una segunda vida, ya que el chasis y muchas otras piezas se podían salvar.

    Fue en este momento cuando Electric GT pensó que el clásico italiano podría ser una base perfecta para una futura transformación. Así que se pusieron manos a la obra y retiraron el antiguo motor V8 de gasolina para ubicar en su lugar tres motores eléctricos que rinden una potencia conjunta de 275 CV. Una potencia que, según palabras de sus creadores, "equivale a unos 415 CV en un motor térmico". Este sistema de propulsión entrega un par de 447 Nm y se alimenta de un paquete de baterías de ion-litio formado por 48 celdas que le dan al coche una autonomía cercana a los 160 km.

    Cinco velocidades en un motor eléctrico

    Un dato curioso de este Ferrari es que en lugar de ir equipado con una transmisión de una velocidad, típica en muchos vehículos eléctricos, utiliza una de cinco velocidades. En concreto, se trata de la caja manual G50 de Porsche, lo que sin duda aumenta las posibilidades y la diversión al volante de este curioso deportivo.

    El Ferrari 308 GTE, como así lo han bautizado sus creadores (la 'E' de eléctrico sustituye a la 'S' del modelo original), cuenta con una serie de modificaciones que afectan al chasis -más firme- y a la imagen exterior, donde figuran unas llantas procedentes del Ferrari 360. Por lo demás, sólo el silencio de su motor lo distingue del 308 GTS de antaño.




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