¿Un Isetta moderno y eléctrico? El mítico utilitario vuelve adaptado a los tiempos
Jorge Arenas
Microlino es el nombre del nuevo Isetta, que resucita varias décadas después como solución a la movilidad en las ciudades. El Isetta antes de BMW: historia de un mito.
En 1954 el fabricante italiano Iso Rivolta, que hacía motos y scooters, lanzó al mercado un modelo muy peculiar: el Isetta. Era una especie de motocicleta cubierta con una carrocería con forma ovoide, a la que se accedía desde una puerta delantera que llevaba fija la columna de dirección. Era un vehículo muy económico que nació como respuesta a una clase media poco pudiente que tenía necesidades de movilidad y no podía acceder a la mayoría de coches que se vendían en aquel momento.
Historia de un icono
El Isetta era minúsculo, tenía una longitud de 2,2 metros (inferior a la de un Smart) y, aunque su fase de prototipo contaba con una sola rueda en el eje trasero, rápidamente adoptó una segunda rueda atrás para lograr una mejor estabilidad ya que existía cierto riesgo de vuelco. Aún así, estas pequeñas ruedas se encontraban muy juntas entre sí. Para moverse, se servía de un motor de moto de 236 cc y 9,5 CV, que lograba una aceleración de 0 a 30 km/h en 30 segundos. Su velocidad máxima era de 75 km/h. Poco, sin duda, pero suficiente para aquellos que simplemente soñaban con un vehículo capaz de transportar a dos personas de un punto A un punto B sin mayores pretensiones.
Un año después de empezar esta aventura, BMW adquirió la licencia de este modelo e incluso toda la maquinaria necesaria para fabricarlo. La firma alemana necesitaba un vehículo de estas características para remontar el vuelo en la época de la posguerra, así que se dedicó a fabricarlo durante unos cuantos años con cierto éxito comercial y es por ello que el pequeño Isseta se le suele atribuir a BMW más que a su verdadero dueño original, ya que fue la firma de la hélice la que le dio verdadera proyección.
El mito regresa en forma de eléctrico
Pues bien, la noticia hoy es que este peculiar coche/moto que ha pasado a ocupar un lugar destacado en los cuadernos de Historia del automóvil, está a punto de resurgir de sus cenizas con un aspecto modernizado y un motor eléctrico.
La empresa que está llevando a cabo el proyecto se llama Micro Mobility Systems y ha denominado al nuevo modelo Microlino. Se trata de una reinvención del Isseta, muy al estilo de lo que han hecho Fiat o Mini con sus versiones actuales, y utiliza un propulsor eléctrico de 15 kW (20,4 CV) que logra una velocidad punta de 100 km/h y sus baterías, una autonomía de 100-120 km).
El proyecto ya está en marcha, pero no será hasta 2018 cuando lleguen las primeras unidades a la calle. En la primera fase se comercializarán 500 Microlinos que, por cierto, ya están todos reservados. Este pequeño y simpático eléctrico está catalogado como cuadriciclo, igual que un Renault Twizy, y tiene un precio estimado de entre 8.000 y 12.000 euros.