Toyota y Subaru se unen para desarrollar coches eléctricos
Jorge Arenas
Toyota y Subaru han anunciado que van a desarrollar conjuntamente una plataforma para coches eléctricos de tamaño medio y grande (pertenecientes a los segmentos C y D), además de un SUV compacto que será comercializado por ambas marcas.
El matrimonio entre estas dos marcas japonesas no es nada nuevo. Comenzó en 2005 y, desde entonces, Toyota y Subaru se han ido involucrando en proyectos de desarrollo, producción y ventas. También es de sobra conocido el acuerdo de colaboración que dio lugar al nacimiento del Toyota GT86 y el Subaru BRZ (2012), dos deportivos de tracción trasera muy genuinos que, de tantas piezas que comparten, pueden ser considerados prácticamente hermanos.
El acuerdo que hoy se pone sobre la mesa esconde una idea muy clara: aprovechar las fortalezas de cada marca para lanzar productos muy completos. ¿Y cuáles son esos puntos fuertes? Subaru, sin duda, tiene mucho que decir en materia de tracción integral; por su parte, Toyota aporta una larga trayectoria en materia de electrificación.
Cabe pensar que a corto-medio plazo veremos salir al mercado un amplio abanico de turismos y todocaminos, todos ellos con algún tipo de electrificación y, al menos algunos, con cuatro ruedas motrices. Cada uno tendrá su logo en el capó y llevará impresa su propia personalidad, pero en realidad esconderán la misma genética. Se trata de aprovechar las sinergias entre compañías para poder hacer frente a los nuevos retos que se plantean hoy.
La industria automovilística se encuentra inmersa en un proceso de profunda transformación. Para dar respuesta a los nuevos desafíos, englobados bajo el acrónimo CASE (conectado, autónomo, compartido y eléctrico), tanto Subaru como Toyota ven necesario llevar a cabo un rápido desarrollo tecnológico en un espectro de iniciativa más amplio que nunca.