Motor
El nuevo Honda CR-V dice adiós al diésel y da un importante salto de calidad
Jorge Arenas
Hace más de 20 años, allá por 1995, un modelo japonés empezaba a jugar con la idea del SUV (Sport Utility Vehicle). Cuando los coches eran puramente asfálticos o todoterreno puros, el Honda CR-V aterrizaba en el mercado ofreciendo un punto intermedio entre ambos mundos, que es justo la filosofía de ese tipo de coche -el SUV o todocamino- que hoy triunfa en el mercado.
Los años han ido pasando para todos, también para el Honda CR-V, que hoy llega a su quinta generación en un momento realmente bueno, ya que se posiciona como el modelo D-SUV más vendido a nivel global. No es ninguna tontería este último dato, como tampoco lo es el hecho de que en España acapare más de un 25% de las ventas totales de la marca.
Las novedades más interesantes
La generación que hoy conocemos llega pisando fuerte. Lo hace con una plataforma nueva, más resistente y ligera, y con unos cambios de diseño que quizá no parezcan muy rompedores a simple vista, pero que sin duda le dan un aspecto mejorado frente a su predecesor. Lo importante está en los detalles: su aspecto musculoso, sus pilares A retrasados, su capó alargado o sus ruedas más grandes contribuyen a crear una sensación visual de mayor solidez y aplomo. Los grupos ópticos también modifican la personalidad del coche en su vista exterior.
Disponible con 5 o 7 plazas, el nuevo Honda CR-V no modifica sus cotas fundamentales (tiene exactamente la misma longitud que antes: 4,6 metros), sin embargo crece ligeramente su distancia entre ejes, lo que se traduce en un interior más habitable, especialmente en las plazas traseras, que ahora ofrecen mayor espacio para las piernas.
El habitáculo siempre ha sido uno de los puntos fuertes del CR-V, igual que el maletero, que en esta nueva generación mantiene un generoso volumen de 561 litros con dos filas de asientos en uso. Quien quiera sacarle el máximo partido puede plegar la segunda fila de asientos de tal manera que queda un suelo totalmente plano y aumenta la capacidad notablemente. Esta segunda fila, por cierto, dispone de ajuste longitudinal de la banqueta (150 mm de recorrido).
A la tercera fila de asientos se accede plegando la segunda en una maniobra relativamente cómoda. Estos dos asientos van ubicados en el maletero y, sin llegar a ser especialmente amplios, sí pueden ayudar a solventar más de un apuro, eso sí, a costa de reducir en gran medida la capacidad de carga en el maletero. Y por si alguien se está preguntando si la versión de 7 plazas es distinta a la de 5, la respuesta es que no: los dos son exactamente el mismo coche por fuera.
La quinta generación del Honda CR-V viene cargada de detalles que dejan claro que se ha diseñado pensado en los pasajeros. Aquí van algunos de ellos:
- Las puertas se abren en un ángulo 6 grados mayor y tienen un diseño que evita que el usuario se ensucie los pantalones por el roce con la carrocería
- Los asientos tienen cuatro soportes lumbares y un sistema de calefacción más eficiente
- En las puertas delanteras hay compartimentos de carga de grandes dimensiones
- Tanto delante como detrás hay varias tomas USB para cargar dispositivos móviles
- El compartimento de carga del túnel central ofrece varias configuraciones posibles y permite guardar hasta un ordenador portátil
- El portón trasero puede tener accionamiento eléctrico con control gestual
- Existe un Head Up display que proyecta información en una pequeña pantalla sobre la instrumentación
- El volante puede ser calefactado
- Disponibles las plataformas Android Auto/Apple Car Play para enlazar el Smartphone al sistema de infotainment del coche
Adiós al diésel…
El nuevo Honda CR-V se lanza al mercado con un solo motor de gasolina y dentro de unos meses se sumará a la gama una versión híbrida. Pero nada de diésel.
El motor disponible hoy es un 1.5 VTEC de gasolina, sobrealimentado, con distinta potencia en función de la transmisión elegida. Con cambio manual entrega 173 CV y con cambio automático rinde 193 CV. También cambia el par, que es sensiblemente superior en el automático (243 frente a 220 Nm). Esta transmisión automática, por cierto, es de variador continuo pero tiene poco que ver con las que conocemos de este tipo. Su funcionamiento se acerca más a un convertidor de par actual que al típico CVT porque la simulación de marchas (7) está muy bien lograda. Así que parece una buena apuesta y una buena alternativa para aquellos usuarios que no quieran un cambio manual.
Las opciones de gama en cuanto a tracción, transmisión y número de plazas son las siguientes:
- Con 5 plazas se puede elegir el CR-V con cambio automático y tracción total o bien con cambio manual y los dos tipos de tracción (delantera y total).
- Con 7 plazas las opciones son las mismas, solo que desaparece la opción manual con tracción delantera.
De la motorización híbrida poco se sabe a estas alturas. Honda no ha querido revelar datos más allá de que "llegará a principios del año que viene" y que "promete ser el híbrido más avanzado del mercado". Permaneceremos atentos a nuevas informaciones que vayan surgiendo en los próximos meses.
Puesta a punto en tecnología
Una de las cosas que más se nota al conducir el nuevo Honda CR-V es su silencio de marcha y el aplomo. El coche ofrece una pisada de calidad y elimina los ruidos parásitos que pudieran llegar del exterior o del propio motor. También ha mejorado la aerodinámica y, en materia de tecnología aplicada a la conducción, llegan dos paquetes de asistentes encuadrados en el marco 'Honda Sensing'. El primero de ellos forma parte de la dotación de serie en cualquier CR-V e integra los siguientes dispositivos:
- frenada anticolisión con detección de peatones
- advertencia cambio de carril
- sistema para evitar salidas de vía con intervención en la dirección
- control de crucero adaptativo con capacidad para mantener distancia con los coches precedentes a baja velocidad
- mantenimiento de carril
El segundo es un paquete que sólo afecta a los modelos vendidos en Europa y consta de lo siguiente:
- reconocimiento de señales de tráfico
- asistente inteligente de velocidad
- control de crucero inteligente adaptativo
Disponible con cuatro acabados ('comfort', 'elegance navi', 'lifestyle' y 'executive'), el nuevo Honda CR-V estará disponible a partir del mes de octubre con el motor 1.5 VTEC de gasolina, con cambio automático y manual, y con tracción delantera y total. Contará con garantía de 5 años sin límite de kilometraje.
De momento no hay precios definidos -los habrá en breve-, pero sí sabemos que las versiones de mayor volumen de ventas se situarán entre los 32.000 y los 34.000 euros. El arranque de gama probablemente se sitúe ligeramente por debajo de los 30.000 euros.