Sale a subasta uno de los primeros coches personales del Rey Felipe VI

Uno de los primeros coches personales del Rey Felipe VI, un Volvo 480 ES de color rojo, ha salido a subasta en el portal 'online' Catawiki, donde la puja estará abierta hasta el próximo 27 de diciembre.

El vehículo, que estuvo en manos de Felipe VI desde 1986 hasta 1988, fue el segundo coche personal del monarca tras un Seat Ibiza con motor 1.5. En el caso del Volvo, la unidad de propulsión es de 109 CV, lo que permite acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en 9,5 segundos y alcanzar los 190 km/h.

Tras pasar por manos de coleccionistas privados después de que la Casa Real se desprendiese de él a finales de la década de los 80, actualmente acumula 155.000 kilómetros recorridos y "se encuentra en perfecto estado y en pleno funcionamiento. No se le ha sometido a procesos de restauración profunda, se ha conservado la tapicería original y solo se ha pintado recientemente para poder seguir presentando ese rojo característico", ha explicado la casa de subastas.

Cabe recordar que el Volvo 480 ES Cupé fue el primer modelo deportivo de la marca sueca en más de una década y el primero con tracción delantera. Estéticamente era un coche muy peculiar. Su longitud es de 4,26 metros y combina de forma sofisticada las líneas típicas de un coche deportivo con la caída del techo acristalada propia de los coches familiares de la época. Era un vehículo pensado para el público joven y de ahí, entre otras cosas, los característicos faros 'pop-up' en el frontal.

"Hace apenas unos meses subastamos uno de los primeros coches que perteneció al Rey Juan Carlos tras ser proclamado como monarca. En esta ocasión, el protagonista es un coche personal de Felipe VI y la expectación en este caso es máxima, no tanto por las características del vehículo en sí, sino por ese valor histórico y emocional que le da el haber pertenecido a la realeza", ha asegurado el experto en coches clásicos en Catawiki, Francisco Carrión.

El coche, que estará expuesto en el stand que Catawiki tiene en el Salón Internacional del Vehículo de Época, Retromóvil, en Madrid, podría alcanzar un valor entre 21.000 y 23.000 euros según los organizadores de la subasta.