Motor

Ferrari FXX-K Evo: una nueva vuelta de tuerca para esta bestia de más de 1.000 CV


    Jorge Arenas

    Sólo Ferrari es capaz de mejorar lo sublime. Cuando parecía que el FXX-K estaba en el top de los superdeportivos, de repente, la firma de Maranello se saca de la manga una evolución para hacerlo más rápido, más ligero y, en definitiva, más eficaz.

    El Ferrari FXX-K Evo, que así es como se llama la criatura, no es en realidad un nuevo modelo, sino un paquete evolutivo para las unidades ya existentes, que se vende en producción "extremadamente limitada" para todos aquellos clientes que quieran disfrutar de un coche laboratorio. Porque esta es la cualidad que mejor define a esta bestia del asfalto.

    Resulta que los ingenieros de Ferrari han desarrollado un pack de mejoras, basándose en la experiencia adquirida en diversas disciplinas de la competición (Fórmula 1, GT3, GTE, Challenge), para implementarlo en el FXX-K y con el objetivo de que el cliente comparta luego sus impresiones con el equipo técnico. Una relación simbiótica que, sin duda, ayuda a la marca a mejorar en sus estrategias de cara al mundo de las carreras.

    El Ferrari FXX-K Evo está pensado para su uso en circuito y dados los 'aditivos' que monta, no está homologado para circular en carretera abierta. Los elementos diferenciadores de esta versión Evo que acaba de ser desvelada son los siguientes:

    - Reducción de peso: mediante componentes de carbono y la introducción de un ala fija trasera

    - Aerodinámica: gracias a un intenso trabajo en el túnel de viento, se ha logrado un aumento de un 23% en la carga vertical, que supone una carga de 640 kg a 200 km/h y de más de 830 kg a velocidad máxima. Por su parte, el paragolpes trasero se ha modificado para canalizar el aire de una manera más eficaz. También se ha potenciado el efecto suelo con la introducción de generadores de vórtice en los bajos.

    - Suspensión recalibrada: en consonancia a los nuevos valores aerodinámicos.

    - Interior rediseñado: llegan elementos como el volante inspirado en la F1 con levas fijas o la nueva pantalla de 6,5 pulgadas que muestra información relativa a la telemetría, el KERS o el cronómetro.

    Donde no hay novedad es en las entrañas de esta bestia, que sigue utilizando el mismo motor 6.3 V12 atmosférico unido a un motor eléctrico, cuyas cifras de potencia y par conjuntos son de 1.050 CV y 900 Nm. Queda claro que el objetivo principal de este coche es aportar claves sobre las mejoras en materia de peso y aerodinámica, más que en prestaciones puras del propulsor.

    El Ferrari FXX-K Evo es el protagonista principal del programa XX en la temporada 18/19. 5.000 kilómetros de desarrollo y 15.000 kilómetros de pruebas de fiabilidad contemplan a este especimen tan particular que rara vez verá ante sus ojos el común de los mortales.




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