Nissan 370Z 2018: pequeños retoques para seguir rindiendo culto a la deportividad

Nissan ha actualizado su icónico deportivo coupé, el 370Z, que tras nueve años sin dar un salto generacional -esta es la quinta- se retoca para seguir rindiendo culto a la corriente automovilística de altas prestaciones. Estamos, por tanto, ante un lavado de cara en el que resaltan diversos cambios estéticos, así como la inclusión de un nuevo embrague que mejora su rendimiento.

Comenzando por las actualizaciones en el exterior, resaltan las manecillas negras en las puertas y parachoques trasero también negros. Los faros delanteros y las luces traseras vienen tintados de color oscuro de serie, una característica que antes solo estaba disponible para el modelo NISMO. Además, todos los modelos 2018 incluyen las llantas de aleación de 19 pulgadas (no solo el nivel NISMO) y se añade entre sus opciones de la paleta de colores el Red Metallic.

Por otra parte, se integra un nuevo embrague tras rubricar una asociación con EXEDY con el que se perfeccionan los cambios de marcha descendentes, reduce la presión que debe ejercer el conductor sobre el pedal y ofrece unos niveles todavía mejores de precisión y confort en los cambios de velocidad, según la firma.

Bajo el capó se mantiene fiel al motor V6 de 3,7 litros y 328 CV, que transmite a la fuerza a las ruedas traseras mediante una caja manual de seis velocidades o automática de siete.

El sistema de información y entretenimiento NissanConnect Premium, que cuenta con una pantalla táctil de siete pulgadas, navegación por satélite, reproductor de DVD y cámara trasera, está disponible como opción.

El 370Z 2018, que ya está a la venta en Europa, alarga una historia que comenzó hace ya casi 50 años desde que en 1969 llegase al mercado el Fairlady Z / Datsun 240Z. Por su parte, los 370Z Roadster y el 370Z NISMO actuales siguen a la venta, pero sin las mejoras del modelo 2018.