Motor
Opel amplía su presencia en el segmento SUV con los nuevos Crossland X y Grandland X
- La familia X de Opel, es decir, la de los vehículos todocamino, crece con la llegada de dos nuevos modelos que se suman al conocido Mokka X. El primero de ellos, el Crossland X, se fabrica en la planta de Figueruelas (Zaragoza) desde el pasado mes de abril y ya está a la venta; el segundo, el Grandland X, se asienta sobre la plataforma del Peugeot 3008 y saldrá a la venta a comienzos de otoño.
Jorge Arenas
Opel Crossland X
Es el acceso a la gama SUV. Mide 4,21 metros de longitud y, a pesar de su compacidad, es un modelo con un cierto enfoque familiar ya que prioriza la habitabilidad y la versatilidad por encima de otros aspectos. No ofrece tracción integral en su gama -para eso está el Mokka X- y sus rivales son modelos como el Renault Captur, el Suzuki Vitara o el Nissan Juke.
La oferta del Crossland X la componen varios motores de gasolina y diésel, con potencias que van de los 80 a los 130 CV. El cambio puede ser manual o automático.
Opel Grandland X
Es la verdadera novedad que ha presentado hoy la firma alemana es el Opel Grandland X. Un modelo que no saldrá a la venta hasta el mes de octubre pero que ya hemos podido ver en vivo. Perteneciente al subsegmento C-SUV, el de los modelos compactos tipo Nissan Qashqai, Seat Ateca, Peugeot 3008 y compañía, pretende ganarse a la clientela por sus cualidades de crossover -posición elevada de conducción, diseño robusto y demás-, pero también por otros argumentos como su peso reducido, su eficiente gama de motores y su tecnología de última hornada. No tendrá, eso sí, ninguna versión de tracción integral en la gama como sí tienen algunos rivales. La respuesta de Opel a este respecto es clara: la demanda de las cuatro ruedas motrices es tan baja que no merece la pena.
En el apartado estético, el nuevo Opel Grandland X destaca por elementos como la parrilla delantera, las luces LED con una firma característica, los pasos de rueda, las llantas de 19 pulgadas (opcionales) y, en general, por unas líneas que enlazan con los diseños de última hornada de Opel. En el interior dicen haber refinado la vida a bordo (lo comprobaremos cuando podamos probarlo, de momento sólo hemos podido ver una unidad preserie en un evento estático) y llegan nuevos elementos como las pantallas de 7 y 8 pulgadas de la consola central.
El espacio es otro de sus puntos fuertes, con un habitáculo que da cabida a cinco ocupantes y un maletero que ofrece un volumen mínimo de 514 litros. Si se abaten los asientos traseros, esta capacidad puede alcanzar los 1.652 litros. Tiene, además, soluciones como una apertura en los asientos para poder llevar esquís, doble altura de carga y un sistema de apertura manos libres para el portón, que, aunque no forma parte de la dotación de serie, puede facilitar mucho la entrada de la carga.
En el apartado mecánico, la gama inicial estará formada por dos motores, uno de gasolina y el otro diésel, ambos dentro del rango de potencia que más demanda acumula. El primero es un 1.2 de 130 CV que consume 5,1 l/100 km. El segundo es un 1.6 de 120 CV que firma u gasto de 4 litros redondos de gasóleo cada 100 km. Más adelante, en 2018, la gama crecerá con nuevas opciones, suponemos que en gasolina y diésel, pero sin especificar por el momento. El motor de gasolina 1.2 de 130 CV se asocia a un cambio manual de seis velocidades, mientras el diésel 1.6 de 120 CV se puede elegir con cambio manual o automático.
A la hora de abandonar el asfalto, como decíamos unas líneas antes, no existe la opción de incorporar la siempre útil tracción integral, sin embargo, en Opel han tenido esto en cuenta y han decidido suplir esta carencia con un selector de modos de conducción que actúa sobre el control de tracción y ayuda a solventar determinadas situaciones en firme resbaladizo.
En el apartado tecnológico destacan algunos asistentes a la conducción como:
- el aviso de cambio de carril
- la lectura de señales de tráfico
- la cámara de visión 360º
- el control de crucero adaptativo
- la vigilancia del ángulo muerto
- el detector de fatiga
- la frenada automática
La conectividad queda en manos de las nuevas pantallas del sistema de infotainment, la posibilidad de enlazar el móvil al coche vía Apple Car Play y Android Auto y otros sistemas como el de carga inalámbrica mediante inducción.
El nuevo Opel Grandland X ya admite pedidos aunque no llegará a los concesionarios hasta octubre. Su precio de partida es de 25.100 euros, sin descuentos aplicados por el momento.