Volkswagen ofrecerá descuentos a los dueños de coches trucados
- Para la compra de vehículos nuevos tras la entrega de los que están manipulados
elEconomista.es
Volkswagen podría ofrecer descuentos a los conductores alemanes que entreguen ciertos modelos afectados por el software ilícito que permitió la manipulación en las emisiones de gases y que está en el centro del mayor escándalo de la historia de la empresa, según informó ayer la agencia de noticias DPA, citando fuentes del fabricante alemán. Toyota recupera el número uno en ventas mientras Volkswagen lidia con su crisis.
La oferta estaría dirigida, concretamente, a propietarios de motores de 1,6 litros diésel porque necesitan un nuevo hardware, lo que supone un recambio más costoso que en otros coches afectados.
Oficialmente, sin embargo, no se ha tomado de momento una decisión específica. Un portavoz de la compañía se ha limitado a indicar que este tipo de ofertas especiales es común en los concesionarios de la compañía.
Hay que recordar que Volkswagen se ha comprometido a revisar 8,5 millones de vehículos afectados por este software. De entrar en vigor este descuento solo en Alemania, como se prevé, afectaría solo a parte de los 2,4 millones de coches a reemplazar que se vendieron allí.
Pruebas más realistas
Los ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea se reunirán hoy, por otro lado, para evaluar los avances en las negociaciones en marcha para reforzar el control de las emisiones contaminantes de los vehículos y evitar así que en el futuro se reproduzcan fraudes como el de grupo alemán.
Varios países han solicitado que este asunto sea incluido en la agenda de la reunión, con el objetivo de obtener más información sobre cómo se está abordando el escándalo a nivel europeo, según han informado fuentes diplomáticas. La Unión Europa (UE) ultima la entrada en vigor a partir del próximo mes de enero de pruebas de emisiones en condiciones reales de conducción, que completen los actuales test de laboratorio, pero queda por determinar el peso que estos nuevos controles tendrán a la hora de conceder los permisos. Las discusiones se centran ahora en el periodo de transición hasta que el nuevo sistema de pruebas sea vinculante, ya que en un primer momento serán sólo test consultivos.
Algunos Estados miembros de la UE, entre ellos Alemania y España, son partidarios de "aplazar" o "flexibilizar" el calendario que defiende Bruselas, que quiere que se introduzcan de manera progresiva desde 2017 y sean obligatorios y vinculantes para todos los vehículos a partir de 2018.
Los niveles máximos de contaminación de óxido de nitrógeno (NOx) que permiten las normas comunitarias son de 80 miligramos por kilómetro, pero desde hace tiempo los expertos son conscientes de la "disparidad" que existe entre los registros en un laboratorio y en carretera. Por ello, el Ejecutivo comunitario sostiene que ese límite de en los motores diésel de los nuevos vehículos debe ser obligatorio en los test en carretera desde 2018, aunque contempla un periodo transitorio de dos años durante los que se permitiría una flexibilidad del 60 por ciento, según han explicado fuentes comunitarias.