La automoción en bloque pide al Gobierno aclarar qué modelo de movilidad quiere
- Los concesionarios perderán 18.000 empleos por el alza del impuesto de matriculación
- Solicitan un Plan Renove de 1.000 euros de ayuda a la compra y no de 400
Ankor Tejero
Las patronales del sector de la automoción han pedido hoy al Gobierno que aclare qué modelo de movilidad quiere, ya que los centros de decisión se encuentran fuera del país, y decidir si se quiere apostar por un modelo de automóvil que se dirija hacia la electrificación o por otro en el que no se quieran vehículos.
Así lo han explicado los presidentes de las patronales de fabricantes de vehículos (Anfac), José Vicente de los Mozos, de la industria auxiliar (Sernauto), María Helena Antolin, de concesionarios (Faconauto), Gerardo Pérez, y de la distribución de vehículos (Ganvam), Raúl Palacios.
Para José Vicente de los Mozos, "hay que saber qué modelo queremos porque los centros de decisión están fuera del país".
En su opinión, "la mesa de automoción se abrió en junio y nos reunimos en noviembre. Las medidas que se anunciaron en junio están teniendo dificultades. Además, el consumidor pagará 800 euros más a partir del 1 de enero por la entrada en vigor del sistema de medición de emisiones WLTP. Esto es un problema porque el vehículo de ocasión está cayendo menos que el vehículo nuevo y eso va en contra de la descarbonización".
El presidente de la patronal considera que la mesa de automoción es un "buen interlocutor, pero es necesario que el resto de ministerios estén integrados. Si no trabajamos unidos, al final nos gustaría ser a todos ganadores, pero habrá ganadores y perdedores".
La presidenta de Sernauto, María Helena Antolin, ha considerado "imprescindible un diálogo real y continuado con la Administración, y con una interlocución gubernamental adecuada que permita poner en marcha los acuerdos y programas, contando con el sector en su conjunto".
"Urge activar medidas ya que garanticen no solo la supervivencia del sector post-COVID, sino nuestra visión de futuro y posicionamiento global para seguir atrayendo nuevos proyectos e inversiones de carácter internacional y anclar así la actividad industrial del tejido de automoción y la del resto de sectores implicados", ha reclamado Antolin.
Por su parte, el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez, ha alertado de que ya no es posible garantizar el empleo en las redes de distribución por la debilidad del mercado y ha estimado que se podrían perder "hasta 18.000 puestos de trabajo" por el alza del impuesto de matriculación en 2021, una situación que provocará que se dejen de matricular hasta 110.000 unidades el año que viene.
Pérez ha lamentado la decisión de apoyar la moratoria del impuesto de matriculación "en un año muy complicado para el automóvil y para la economía familiar. Estamos alejando el vehículo de la capacidad de compra del español. La democratización del transporte no la podemos alejar de las rentas medias y bajar. El cliente va a mantener su vehículo, por lo que se incrementará la edad y las emisiones ya que será más antiguo".
Mejores incentivos
De otra parte, el sector ha solicitado un Plan Renove que ofrezca 1.000 euros de ayuda para la compra de un vehículo de combustión, tal y como sucedió con los ocho planes PIVE y no 400 euros como en la actualidad.
Para Pérez, "el Plan Renove era demandado por la red de distribución, pero 400 euros no incentivan realmente al cliente". Por ello, ha considerado que "hay que hacer un plan nuevo con los fondos que queden del Renove", los cuales vencen el próximo 31 de diciembre y que tan solo se han empleado 33,8 millones de euros, de los 250 millones disponibles, lo que supone el 13,5% del total.