Hacia un cambio del periodismo

El periodismo también atraviesa un momento de cambio profundo. Hemos entrado en una situación en la que internet marca las nuevas formas y tendencias de la información. La inmediatez ya no tiene casi mérito, es lo que todos esperamos. El periódico de papel se ha quedado muy anticuado y si hasta ahora decíamos los periodistas: “no hay cosa más antigua que el periódico del día anterior”, en la actualidad el mismo día que sale el periódico ya sale viejo y esas noticias ya no interesan. Ante esta situación la pregunta surge sola: ¿hacia dónde vamos? Claramente el periodismo tiene que tomar nuevas formas y nuevas maneras de hacer. Pero nunca se perderá lo nuclear del periodismo que es la información, transmitida por el medio que sea, pero siempre será información, realizada por un periodista y no por aficionados bien intencionados. Es muy normal que un amigo nos recomiende una pastilla ante un dolor de cabeza; o que nos den consejos ante una multa injusta; o que nos diagnostiquen que le pasa a nuestro coche que le suena todo cuando arrancamos… Sin embargo eso no significa que el amigo que nos recomienda una pastilla sea médico, o que sea abogado el que nos aconseja ante una sanción de tráfico, o que sea mecánico el que nos advierta sobre una avería en nuestro coche. Igualmente no es periodista el que escribe en alguna red, o el que tiene un blog, o el que se ha abierto un portal en internet para comunicar todas sus inquietudes.

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