La rosácea: cómo tratarla en mejillas, nariz y frente
Ana Gómez Viñas
Afecta al rostro, principalmente mejillas, nariz y frente, provocando un efecto antiestético, además de molestias. Estos son los tratamientos más eficaces.
Se desconocen las causas de la rosácea, pero hay factores que propician su aparición, como hereditarios o el tipo de piel. También hay otros ambientales, como los cambios repentinos de temperatura (frío o calor), estrés, algunos cosméticos, bebidas o cambios hormonales. En invierno, la rosácea puede empeorar por la bajada de temperaturas.
Hay varios tipos de rosácea y estas son sus características:
-Enrojecimiento del centro de la cara, que puede aparecer de forma brusca, con inflamación de la piel que tiene gran sensibilidad al tacto y presentar sequedad.
-Pequeñas pústulas o granos que recuerdan al acné, aunque sin inflamación ni pus. La piel tiene aspecto graso y es muy sensible.
-Engrosamiento de la piel al soportar una inflamación. La piel se ve rugosa, con el poro muy dilatado, se ven arañas vasculares rotas y bultos internos. Suele darse en varones y especialmente en la nariz (rinofima), pero también puede aparecer en orejas, frente, barbilla o párpados.
Tratamientos
Para lograr el éxito hay que combinar diversos tratamientos, además de que el paciente debe adoptar unos hábitos de alimentación, higiene y estilo de vida que ayuden a mejorar el aspecto de la piel. La doctora Gema Pérez Sevilla, cirujana maxilofacial y experta en medicina estética facial, aconseja:
Tratamientos tópicos: cremas con fármacos como la Ivermectina, que nos ayuden a disminuir la cantidad de demodex, ectoparásito relacionado con la rosácea, combinadas con una correcta selección de cosméticos y productos de higiene que nos ayuden a reforzar la función barrera de la piel, así como a calmar su irritación.
Antibióticos orales: específicos para la piel, como azitromicina o tetraciclinas, que ayudan a controlar los brotes más graves bajando la inflamación.
Tratamientos con luz intensa pulsada (IPL) y láser vascular: podemos utilizar estos tratamientos por separado o combinados para mejorar la salud de la piel, cerrando los vasos dilatados, mejorando manchas rojas y marrones, e incluso flacidez y deshidratación. Conseguiremos unificar el tono de la piel y darle luminosidad.
- Isotretinoína: se trata de un derivado sintético de la vitamina A que ha demostrado tener una gran eficacia en el control de esta patología. Se administra por vía oral y en dosis muy bajas para minimizar sus efectos secundarios. Durante el tratamiento es fundamental evitar quedarse embarazada puesto que uno de sus principales efectos secundarios es la malformación fetal.