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Don Juan Carlos come en el restaurante que llama "imbécil" a Pedro Sánchez


    Silvia Armesto

    Santiago Abascal y otros dirigentes de Vox acuden a De la Riva, casa de comidas que visitó el rey don Juan Carlos hace un año, según desvela el director del establecimiento. Además de buena cocina de mercado, en esta tasca de lujo se cantan himnos, se ondean banderas de España y se insulta a políticos que no son de derechas, como el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

    En la madrileña calle de Cochabamba, a un paso del estadio Santiago Bernabéu, se encuentra De la Riva, restaurante nacido cuatro años antes de la Guerra Civil, allá por 1932, en plena república. El establecimiento se ha convertido en una especie de lugar de culto a la comida tradicional, de mercado, con la estética, los modos, los platos, los manteles, las mesas y el servicio propios de una casa de comidas pero en la que abunda una clientela selecta, con poderío económico, ya que el precio de la cuenta puede parecerse más a un destino menos casero y hasta con alguna Estrella Michelín.

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    Cuando se fundó, al comedor dirigido por Obdulia y Paulino de la Riva en el centro de Madrid acudían obreros con su tartera. Ahora ya no van tantos obreros porque el menú es difícil que baje de 30 euros y no es nada extraño que pase de 60 por persona. La comida casera que sirven está muy buena, pero se paga bien, por encima de la aparente categoría del establecimiento. Mucho plato de cuchara bien hecho, perdices estofadas, ensaladilla rusa, delicias de merluza, gallina en pepitoria o tortilla de patata son solo algunas de las sugerencias que te plantea Pepe Morán, quien dirige el negocio desde hace varios lustros, dependiendo de lo que haya en el cercano mercado de Chamartín o en el de Maravillas.

    Al estar situado a un tiro de piedra del templo sagrado del Real Madrid, el culto hacia el equipo blanco en De la Riva se convierte en rito a menudo y en días de partido es rutina obligada. No es que no dejen entrar a comensales del Atlético de Madrid o del Barcelona, por ejemplo, pero la contundencia, el griterío, los himnos y cánticos llegan a apabullar a hinchas discrepantes que se hayan confundido de lugar, que vayan de consortes o acompañantes o simplemente se se hayan despistado, atraídos por los manjares que ofrecen, regados con los vinos que sirven en frascas muy tradicionales.

    Manolo Escobar y su 'Que viva España' compiten con 'vivas' a la Guardia Civil, a la Legión o a quien vaya surgiendo, según se van vaciando las frascas de tinto que pueblan las mesas.

    Una prueba evidente de que dejan comer allí a personas que no profesen un madridismo confeso y de que hacen excepciones, es que entre la clientela de tan singular tasca está el Rey don Juan Carlos. Sin embargo, aunque no haya oficialidad ni reconocimiento público, todo el mundo sabe en España que el Emérito siempre ha sido del Real Madrid y su hijo don Felipe, del Atlético de Madrid.

    Desde luego, a la vista de la imagen compartida en Instagram por el propio restaurante, el padre del jefe del Estado no se sentía nada incómodo arropado por los madridistas del establecimiento y sobre todo agasajado con los manjares que le brindaron antes de la sobremesa de la que Su Majestad parece disfrutar tomando ya el café.

    Las sobremesas en De la Riva son marca de la casa. El restaurante, que abre de 13 a 18 horas, suele dejar a clientes conocidos alargar la comida, disfrutar de la buena conversación con café y copa, y hasta de alguna partida de mus si hay quorum.

    El rito madridista del cántico, el ondear de las banderas españolas, los vivas a España y a la Guardia Civil y demás síntomas del españolismo tienen al responsable del local como director de orquesta: es el propio Pepe Morán quien anima, como si llevara una batuta en la mano, a quienes disfrutan del jolgorio.

    Pepe Morán no oculta sus preferencias políticas, orientadas más hacia Vox que hacia Ciudadanos o el Partido Popular, a quienes considera aliados de la victoria socialista.

    En el interior de la tasca hay fotos de Franco y basta observar las publicaciones de su Instagram para hacerse una idea de lo que piensa, por ejemplo, de Pedro Sánchez, o cómo se cachondea sin piedad de Begoña, su mujer, o de la mujer del anterior presidente socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, Sonsoles Espinosa, a quien compara, en tono jocoso, con "el príncipe de Beckelar", por el peinado que exhibió cuando acudió el viernes pasado junto a su marido a rendir homenaje al fallecido Alfredo Pérez Rubalcaba.

    Pero el gran damnificado del furor anti-izquierdista de Pepe Morán es el presidente del Gobierno en funciones. En el Instagram del establecimiento directamente le llaman  "imbécil", "mamarracho", "cabrón", "mentiroso patológico" o "tipejo". Veamos el texto que escribe junto a la imagen de Pedro Sánchez como Tutankamón ("TutanCabrón"):

    Por España, me niego a creer que este individuo, sin preparación, sin lealtad alguna, sin cultura ni educación, pueda volver a ser Presidente. Los accidentes de este tipo para la seguridad nacional solo deberían de ocurrir una vez. De entre los millones de votantes anónimos tienen que salir esa mayoría inteligente, capaz y patriota que sabe reconocer a un impostor. Parece mentira en cualquier caso que incluso haya quien le vote, a excepción claro está de los pelotas, chupones y clientes del Mamarracho.

    Tampoco Pablo Casado les parece a los del restaurante De la Riva lo bastante de derechas, y sobre el líder del PP cae el peso de su sentido del humor.

    El colectivo LGTB no se libra de los repasos personales que este restaurador que da de comer entre otros muchos al Rey don Juan Carlos se permite en el uso de su sagrada libertad de expresión. A raíz de la polémica surgida en la sala Barceló, porque la Fiesta Tanga canceló un evento suyo, al serle alquilada también a Vox (que propone llevar la fiesta del orgullo Gay a la Casa de Campo), el jefe de De la Riva deja clara su postura: "Me encanta lo solidaria, comprensiva y diversa que es esta gente. O sea que si a De la Riva vienen, Abascal, Ortega o Ivan Espinosa no vendréis......pues vienen", dice Morán, para añadir su toque tolerante y demostrar que no es homofóbico: "Y todos sois bienvenidos pero no me obligues a elegir eh!!!!".

    Por si a alguien le queda alguna duda de los pronósticos y las ilusiones políticas de Pepe Morán, el director de De la Riva se dirigía así a España antes de las elecciones generales del 28-A, recogiendo fotografía y discurso del candidato de Vox a las Europeas, Hermann Tertsch:

    Yo parto de la base de que el Voxto de Abascal lleva tiempo gestándose y eclosionara el 28A de una forma sorprendente. Lo veo venir al margen de los medios, de Michavila y de los debates. Si Vox rebasa los 50, creo firmemente en ello, y Cs y PP mejoran en su partido de vuelta hoy en A3 la cosa puede ser muy diferente a como espera el Dr Sanchez. Para eso tienen que acabar el debate sin que el Mamarracho les dé la mano, indignado y enfadado por la que le ha caído encima, como cuando a Rajoy le llamo ladrón e indecente en su cara. Yo no me creo que haya tantos y tantas que les guste que les convoquen con tanta pormenorizacion por razón de su sexo, ni muchos o muchas deseando exhumar a Franco, acoger a media Africa o queriendo vivir eternamente tutelados en sus gustos, usos y costumbres, por un estado que a cambio de regalar supuesto bienestar, nos exprime cada día más y se convierte en un poder opresor que contagia de tutela mal entendida a Ayuntamientos y autonomías y cada día resulta más agobiante.

    Veremos el 28 que pasa, yo apuesto porque vamos a retomar esta España desquiciada, mirando al futuro con ilusión y dejando el pasado solo para estudiarlo en los libros de historia como realmente fue.

    Un abrazo salud y pedal y Viva España!!!