Miguel Bosé declara este jueves por videoconferencia en el juicio contra su madre
Informalia
La Fiscalía pide para la madre de Miguel Bosé dos años de cárcel por quedarse, presuntamente, con el Picasso de una empleada que falleció y que Lucía Bosé (88) vendió en una subasta por un valor de 198.607 euros. La Audiencia Provincial de Madrid juzgará este jueves a la actriz y Miguel Bosé (62), su hijo, declarará por videoconferencia. "No viene porque no le da la gana", ha dicho su madre a las puertas de los juzgados.
El juicio contra Lucía Bosé fue aplazado en noviembre del año pasado, ya que la parte denunciante consideró que el testimonio del cantante era clave. El Tribunal lo aceptó y se esperó para que Miguel Bosé recibiera la citación. Además de la pena de cárcel, la Fiscalía solicita una multa de ocho meses con cuota diaria de 20 euros y la correspondiente indemnización a las personas perjudicadas.
En el escrito de acusación, el fiscal considera probado que la empleada, Remedios, vivió en el domicilio de Lucía hasta su muerte, quedando allí sus pertenencias. Entre ellas se encontraba el dibujo realizado por Picasso, en cuyo dorso rezaba "Para Reme", y que Lucía vendió tras el fallecimiento de su trabajadora.
El dibujo se vendió en una subasta el 25 de junio de 2008 y alcanzó un precio de 198.607 euros. Este dinero nunca fue entregado a sus legítimas herederas, las dos sobrinas de Remedios, la empleada fallecida de Lucía Bosé.
El Ministerio Público ha confirmado que el lugar de residencia de Remedios ha sido la casa de Lucía, donde ha vivido más de 54 años al servicio de la familia Bosé. La empleada de Lucía Bosé tenía todas su pertenencias en esta casa, incluido el dibujo realizado por pintor malagueño, Pablo Picasso.