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Bárbara Rey se reserva grabaciones del rey don Juan Carlos como protección
Martín Alegre
A los 68 años, sin trabajo ni perspectivas laborales y con la cuenta corriente exhausta, Bárbara Rey quiso el pasado fin de semana quemar su último cartucho en el Deluxe (se habla de un caché de 25.000 euros), aprovechando los efectos de las explosivas declaraciones de Corinna.
Su puesta en escena fue una burla a los espectadores y a los periodistas que la entrevistaban, una demostración de cinismo, hipocresía y audacia a partes iguales. El espacio de Telecinco prometía que este sábado, Bárbara "lo contaría todo, todo, todo". ¿Se acababan las medias verdades, las amenazas veladas, las insinuaciones de los últimos 20 años?
Pues resulta que no, que fue más de lo mismo y encima con conato de abandono del plató, ofendida porque los periodistas hacían su trabajo, apoyados en datos contrastados y en las declaraciones de Bárbara Rey al periodista Manuel Cerdán, que hizo resurgir de nuevo el affaire del monarca y la vedette.
Le recordaron en el Deluxe párrafos publicados como aquel de que la dirección del CNI facilitó a Don Juan Carlos un chalé adosado en una zona residencial de Madrid para facilitar sus encuentros secretos con Bárbara Rey, durante más de tres años. La vivienda unifamiliar había sido alquilada por los servicios de información como un centro operativo para reuniones de alto nivel de los espías pero acabó convirtiéndose en un nido de amor para altas personalidades. La actriz murciana ha reconocido que visitó en más de una ocasión ese chalé, situado en el número 6 de la calle Sextante de Aravaca, en una zona próxima a Madrid, por petición expresa de Don Juan Carlos. "Era un lugar frío, desocupado y vulgar, y el frigorífico siempre estaba vacío", recordaba la actriz en enero a OKDiario.
La reacción de María García García, nombre real de Bárbara fue un insulto a la inteligencia de los entrevistadores, al afirmar: "No me acuerdo si estuve, que los chalés de esa zona de Madrid son todos iguales", Tampoco recordaba haber hablado con el digital que dirige Eduardo Inda hace poco más e un año. Es más, avanzaba que iba a demandar a Cerdán y al medio.
Cuando le citaron párrafos del libro de Pilar Urbano donde la periodista habla de su relación con el que fuera jefe del Estadoa, Bárbara aseguró que acababa de enterarse allí mismo de lo que había escrito Urbano y que pondría una demanda a la periodista a la que descalificó burlándose de ella por su altura.
Peor escapatoria tuvo cuando el programa rescató unas antiguas declaraciones de Angel Cristo, lúcido y todavía en forma, asegurando que su ex mujer "había sido capaz de chantajear al hombre más importante del país".
Ese chantaje parece que sigue vigente. B.R. reconoció que todavía podía conservar bastantes de las 20 ó 30 cintas y grabaciones que supuestamente conserva de don Juan Carlos. Le preguntaron: "¿Te proteges con el material que guardas?". Y contestó: "Eso me lo reservo".