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"Sara Carbonero es todo lo que yo no soy": la carta de la ex compañera de clase de la periodista
Informalia
María Jiménez, antigua compañera de Universidad de la periodista, ha escrito una sentida carta en el portal Tribus Ocultas donde compara su vida con la de la presentadora, al tiempo que analiza los éxitos de ésta y se pregunta por qué ella no lo ha conseguido.
Sara Carbonero (34) es una mujer de éxito: empresaria, modelo, triunfa en su profesión y esta casada con el futbolista Iker Casillas (37). Vamos, un chollo. Todo lo contrario que la autora de este escrito, que asegura que la idea de la carta surgió cuando vio la enorme imagen de Sara decorando uno de los edificios de la Gran Vía de Madrid. La presentadora lucía "estupenda, delgadísima y presumiendo de pelazo". Entonces, María pensó: "¿Qué narices he hecho yo con mi vida para no estar ahí colgada?".
"Sara es periodista. Sara tiene una marca de ropa sostenible junto a su amiga Isabel Jiménez convirtiéndose así también en empresaria. Sara se casó con Iker Casillas y es madre de dos hijos. Sara está a punto de llegar a los dos millones de seguidores en Instagram. Sara es todo lo que yo no soy. Y lo digo desde la más profunda admiración y envidia. ¿Sana? No estoy segura", escribe la ex compañera de la Universidad Complutense de Madrid.
María también cuenta que Carbonero "dejaba sin respiración a una clase entera" y que la apodaban "Pocahontas" sus compañeros. "Aunque yo terminé la carrera y ella no, lo cierto es que su vida ha ido muchísimo mejor que la mía", alega Jiménez.
El texto prosigue con una sinceridad arrolladora y una confesión por parte de María Jiménez, que asegura que "está agotada" por los cambios de trabajo, la crisis, la búsqueda de un alquiler asequible. Además admite que esta "decepcionada" consigo misma: "He hecho todo cuanto ha estado en mi mano para triunfar, pero obviamente he fracasado en el sentido en el que solo he conseguido ser una hormiga obrera más. Quizá el problema también esté en que yo, de base, no tengo el talento que tiene ella ni escribo como lo hace ella ni comunico de la misma manera", asegura Jiménez, que acaba el escrito preguntándose si sus compañeros de clase se sienten de la misma manera.