Diego Matamoros y Estela Grande se dan el "sí, quiero": todas las fotos de la boda
Informalia
El viernes 13, en la finca Prados Moros de Guadarrama (Madrid) y rodeados de toda su familia (o casi). Así fue el mágico día de Diego Matamoros y Estela Grande, que se dieron el "sí, quiero" tras dos años juntos. Una jornada inolvidable que han compartido con todos sus seguidores a través de las redes sociales.
El novio fue al altar acompañado por su madrina y hermana, Laura Matamoros, guapísima con un vestido de Rosa Clará: "Un viernes trece inolvidable, en el que hubo muchísimas sorpresas y en el que vi realmente la felicidad en Estela y Diego. Enhorabuena familia, que sea para toda la vida", ha escrito la novia del chef Benji Aparicio junto a unas bonitas fotografías.
El novio, por su parte, lució un elegante traje de chaqué azul de rayas diseñado por Nacho Montes, que combinó con una original corbata y una sonrisa de oreja a oreja: "Magia mucha magia, siempre tiene que estar presente y eso nunca se tiene que perder. Estar en un momento tan único, acompañado de toda la gente que te quiere es algo inolvidable. He dado un paso único con la mujer que tenía que darlo que es igual de única e inolvidable".
Finalmente, Diego pudo disfrutar de la compañía de su padre, Kiko, cuya asistencia no estaba confirmada. Allí, el tertuliano de Sálvame saludó con cortesía a su ex mujer y madre de sus hijos Laura y Diego, Marián Flores, con la que no mantiene una buena relación. Guardaron las formas pero se sentaron en filas distintas y parece que Laura fue la encargada de supervisar la paz entre ambos durante la ceremonia.
Estela Grande también estuvo rodeada de todos los suyos e iba guapísima con un vestido con cuerpo de encaje en escote corazón. Una de sus damas de honor leyó unas palabras muy emotivas durante el casamiento, en el que los novios leyeron unos votos. Además, cumplió con la tradición de lanzar el ramo a las amigas solteras, uno de los momentos más divertidos de la noche.
La celebración tuvo lugar en la finca Prados Moros de Guadarrama (Madrid) y estuvo amenizada por el fantástico violinista Javi Lin, uno de los grandes descubrimientos de la última edición de Got Talent.