El primer marido de Corinna, Philip J. Adkins: "Es una sociópata narcisista"

El empresario, gran amigo del rey Juan Carlos, se ha pronunciado días más tarde de conocer las cintas en las que su ex mujer revelaba la supuesta fortuna opaca del rey emérito en Suiza y sus presuntos negocios, además de sus escarceos con otras mujeres. Philip J. Adkins (58) ha defendido a su amigo y ha atacado duramente a Corinna zu Sayn-Wittgenstein (53).

"¿De verdad piensa alguien en España que está tratando con una persona honesta y estable? Vamos, hay muchas pruebas en su forma de expresarse en privado que indican que Corinna es una sociópata narcisista", ha dicho el británico a Vanity Fair. Además, el empresario ha manifestado: "España le dio a Corinna un breve momento de atención pública y ahora ella tiene que lidiar con la dolorosa realidad de ser poco interesante e insignificante". Y ha añadido: "Corinna siempre ha estado muerta por dentro. No hay cirujano plástico ni banquero que pueda cambiar eso".

Adkins ha atacado a la que fue su mujer, a la que llama con desprecio "Su Alteza Serenísima": "Juan Carlos es mi amigo y es un gran hombre y una figura histórica. Ha contribuido al bienestar de una Nación. Siempre tendrá mi respeto, afecto y lealtad". De la misma manera, Philip ha confesado al citado medio que ha realizado estas declaraciones porque quiere proteger a su hija Nastassia de lo que "Su Alteza Serenísima está haciendo, diciendo o fantaseando".

El empresario conoció a Corinna en 1989 en Francia, cuando unos amigos les presentaron en una cena. Dos años después se casaron y tuvieron a su hija, Nastassia Adkins, en Londres. Adkins fue quien enseñó a cazar a la alemana. Por eso Corinna le pidió que le acompañara en el viaje a Botsuana con ella y el rey Juan Carlos cuando tuvo lugar el incidente del elefante, a pesar de estar ya separados.

Desde ese viaje, el monarca y Adkins son grandes amigos: "Es un hombre estupendo", manifestó el magnate al volver de África, cuando aún defendía a su exmujer: "Si algo caracteriza a Corinna es su discreción y su lealtad. Ella no es una escaladora social, eso es ridículo. Ha tenido y tiene una vida súper interesante y es muy divertida. Es el tipo de mujer que cualquier hombre, incluyendo Ernest Hemingway, perseguiría", aseguró. Parece que las cosas entre ellos han cambiado mucho en estos seis años.