Pilar Urbano: "Felipe me confesó que hubiera renunciado a Letizia por el trono"
Informalia
La experta en Casa Real ha desvelado algunos secretos hasta ahora ocultos de Zarzuela, como que habló con el Rey dos días antes de su boda con la Reina y le confesó: "Si me hubiesen dicho que no (los reyes Juan Carlos y Sofía) habría renunciado a Letizia, aunque se hubiese abierto la tierra bajo mis pies".
Pilar Urbano visitó el programa de Risto Mejide y sentada en su Chester sacó algunos trapos sucios de Casa Real: "Felipe me dijo 'Soy el único español que ha nacido con un destino reinar y trasmitir el trono a mi sucesor. Si yo no cumpliese con eso por un capricho, un deseo del corazón, un afecto… estaría traicionando mi destino y mi deber". Según Urbano, cuando el rey conoció a la madre de sus hijas (por cierto, Leonor es zurda, como el emérito), comenzó una ronda de consultas: "Primero probó con sus hermanas, que lo apoyaron, luego con sus tías, consultó a Felipe González, con Aznar, con Calvo Sotelo, no sé si con Zapatero… Cuando ya había un ambiente propicio es cuando se lo dijo a los reyes y les dio un ultimatum: 'No me casaría sin amor, lo encuentro una tortura. con Sannum ya lo conseguisteis, pero con Letizia, no".
Urbano ha desvelado que el mayor reto de Felipe ha sido poner en su sitio a la infanta Cristina: "Con su hermana ha hecho el cortocircuito, su hermana era su hermana del alma. Primero la ha expulsado de la familia Real, representaciones, de España, la ha expulsado del ducado de Palma y le ha dicho que no se instale en España y más: le pidió a Torres Dulce, fiscal general del Estado, que la tratara como a una ciudadana cualquiera".
Uno de los grandes secretos que ha desvelado la periodista es que el rey Juan Carlos organizó una reunión de élite cuando imputaron a la infanta Cristina: "Se reunieron el rey, el jefe de gobierno Rajoy, el jefe de la casa, el ministro de justicia Gallardón y el fiscal general del Estado, Torres Dulce. Se habla con Pedro Horrach y el fiscal hace un documento que se llama hoja de ruta, donde dice los pasos que hay que hacer para que la infanta no sea imputada. Intentaron tratar de recusar al juez: le persiguieron, expiaron, le ponían silicona en las cerraduras, palillos, piedrecitas, excrementos humanos en la puerta de casa y le rajaron las ruedas del coche. Le ofrecieron llamar a la infanta como testigo a cambio de no recurrir la sentencia de Roca y los demás, pero el juez se negó".