El diestro Pepín Liria asegura que no ha vuelto a torear por dinero

¿Por qué un hombre de 47 años, con la vida resuelta y en buena posición económica, se juega la vida delante de un toro? "Quien piense que es por dinero, se equivoca rotundamente" aseguraba a Informalia Pepín Liria, que este 10 de marzo se vistió de luces en Illescas (Toledo), después de 10 años apartado de las plazas, con la excepción del festival benéfico en el que participó a favor de las víctimas del terremoto de Lorca, sus paisanos de Murcia. En Illescas compartió cartel con El Juli y Josemari Manzanares.

 Arrancó el festejo con un Pepín Liria emocionado y ovacionado por afición de Illescas en su reaparición para  conmemorar sus 25 años de alternativa. Su primero  lució el hierro de Montalvo. Le recibió de rodillas y dejó algunas series que recordaron al diestro en su gran época. . Pero fue en su segundo cuando la raza y la fuerza de siempre resucitaron con un José Vázquez que mantuvo buen ritmo. Pepín hizo vibrar a los tendidos y recibió las dos orejas. El toro fue premiado con la vuelta al ruedo.

"Siempre había pensado torear una tarde cuando se cumplieran 25 años de mi alternativa, que son ahora este 2018. Y hablando con Espartaco me dijo: "Ya que te preparas, igual para una que para tres tardes, torea algo más. Por eso voy a hacer, cuatro o cinco plazas más".

El torero murciano asegura que tiene además motivaciones sentimentales para este regreso. "Rendir un homenaje a mis compañeros Yván Fandiño y Víctor Barrio, muertos por torear y vivir su vocación. Ahora que hay gente que nos insulta, la sociedad nos da un poco la espalda y se nos cuestiona, es momento de dar la cara y demostrar que no somos delincuentes, somos artistas y tenemos raza y orgullo para defender lo nuestro".

Liria insiste en que con las cuatro tardes que podría torear, nadie se hace rico ni arregla una situación económica. "Nosotros nos movemos por algo más que el dinero. Yo no tengo necesidad de jugarme la vida. El toro tiene muchos valores que yo enseño a los chicos que van a la escuela taurina".

En estos años alejado de los ruedos, Pepín Liria se ha dedicado a la Escuela Taurina de Murcia, de la que es director, y a jugar al golf, un deporte en el que tiene un hándicap casi de profesional. Separado desde hace años de su esposa María José Pardo, Pepín Liria, está considerado un torero fino y atractivo con muchas conquistas en su haber.U na de ellas ha sido la modelo Raquel Rodríguez, elegida Miss España en 1.994 y también divorciada, aunque ninguno de los dos confirmó la noticia, ni siquiera cuando se publicaron sus fotos en Baqueira Beret o en la plaza de Las Ventas.