Las visitas de Mario Vargas Llosa al cirujano plástico cada tres meses
Informalia
A sus 81 años, el novio de Isabel Preysler muestra cada vez un aspecto más rejuvenecido y todo gracias a los tratamientos del doctor Juan Peñas, especialista en cirugía plástica y tratamientos de mesoterapia, a quien visita una vez cada tres meses con la más absoluta discreción.
Mario Vargas Llosa acude cuatro veces al año a la clínica del reputado cirujano. Eso sí, no lo hace como un paciente más, ya que al escritor le realizan sus tratamientos por la noche, para que nadie le vea, según ha asegurado la periodista Pilar Eyre (66).
Éste no es único tratamiento que Vargas Llosa hace para mantener su piel tersa. El novelista visita una vez a la semana y junto a Isabel Preysler (67) el centro Massumeh, ubicado en el madrileño barrio de Salamanca. Allí recibe sus tratamientos a puerta cerrada y de forma exclusiva.
Entre algunos de los ingredientes que ayudan a rejuvenecer su piel destacan el caviar, polvo de diamante, perla negra o seda.
Desde que inició su relación con Preysler hace tres años, Vargas Llosa cuida más su alimentación y su físico. Además de los tratamientos estéticos a los que se somete habitualmente, acude todos los veranos desde hace más de 20 años a la prestigiosa clínica Buchinger, en Marbella. En ese lugar, el escritor sigue una dieta de adelgazamiento y depuración que combina el ayuno, clases de meditación y terapias de belleza para piel y cabello. Lo hacía en compañía de su esposa y madre de sus hijos, Patricia Llosa, hasta que se divorció para comenzar una nueva etapa junto a la reina de corazones, que ha sido su compañera en Buchinger en los últimos dos años.