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Lourdes Montes: "Echaré de menos ver a mi marido vestido de torero"


    Informalia

    El pasado sábado, Fran Rivera (43) se cortó la coleta, dejando atrás una larga carrera en los ruedos. Días después, su mujer abre el corazón y habla de lo que siente ahora que el diestro ha dejado para siempre su profesión. Aunque ella era la que más esperaba esta decisión, ahora, curiosamente, asegura que "echará de menos" verle vestido de torero.

    "Quizás os parezca loca o inconsciente pero saber que era la última corrida de Fran me dio una sensación inmensa de tristeza. He vivido tantas cosas bonitas e interesantes estos años, experiencias que solo se viven en el mundo del toro y desvincularme de todo eso me da pena", escribe la propia Lourdes Montes (33) en su blog personal de ¡Hola!.

    Fran se despidió de los toros el sábado en La Goyesca, una corrida que la diseñadora sevillana nunca olvidará: "El fin de semana de la Goyesca siempre es emotivo (...) Este año la ilusión y las expectativas eran aún mayores. Es cierto que los días previos a la corrida han sido duros, Fran estaba muy nervioso y creo que también muy triste", cuenta Lourdes, quien añade: "El sábado toda la plaza estaba con él, fue maravilloso ver cómo todos sus amigos, sus compañeros estaban ahí transmitiendo su cariño, su respeto y su admiración".

    Para su último paseillo, el matador lució un traje diseñado por su propia mujer: "Fran estaba guapísimo, el vestido fue justo lo que quería para él ese día, meses de trabajo dieron el resultado que esperábamos; algo elegante, clásico pero original, un homenaje al torero Pedro Romero, algo con sabor antiguo, artesanal", dice la también abogada, que desvela dónde y con quién se vistió Fran en un día tan especial: "Ver vestirse a un torero es algo mágico (...) Para esta ocasión, Fran y Cayetano decidieron vestirse juntos, en la casa de su infancia, en la casa más torera de España, rodeados de íntimos amigos que querían ver en esta liturgia a Paquirri por última vez". También estaba su única hija en común, Carmen, quien "llevó un vestido hecho para ella para la ocasión", cuenta la madre de la pequeña.

    Toda esta liturgia, estos sentimientos hacen que Lourdes reconozca que lo echará de menos: "Aunque lo sensato es que Fran debía cortarse la coleta, sé que en el fondo de mi corazón siempre echaré de menos ver a mi marido vestido de torero…", concluye.