Moda

Melanie Gaydos, la modelo con trastorno genético que rompe moldes


    Informalia

    Tiene 28 años, es estadounidense y desde que nació su vida no ha sido para nada fácil. Melanie Gaydos vino al mundo con un trastorno genético llamado displasia ectodérmica. Se trata de un problema que impide el normal desarrollo de los huesos, cartílagos, uñas y dientes. A pesar de las dificultades, Melanie ha conseguido hacerse un hueco en el mundo de la moda derribando las barreras que parecían imposibles.

    Desde que era una niña sufrió el estigma de ser diferente a los demás y ahora parece querer mandar un mensaje a aquellos que la rechazaron simplemente por no tener un físico común. Gaydos es sin duda todo un ejemplo de lucha y superación. "Estaba muy deprimida. No creía que viviría más allá de los 18 años", ha confesado Melanie en una entrevista a Metro UK. Su enfermedad afecta sólo a una de cada 100.000 personas y no tiene cura. Además, cuenta con otros síntomas como la escasa tolerancia al calor, la ausencia de lágrimas y sudor y una visión deficiente.

    Melanie comenzó a trabajar como modelo en el año 2013 impulsada por su novio y después de ser rechazada por varias agencias al ver su book de fotografías. "No empecé en el modelaje por otra gente, por más egoísta que suene", afirma. "Lo estaba haciendo por mí misma. Pero de lo que me he dado cuenta es que, haciendo esto por mí, estoy ayudando a que otras personas se sientan más cómodas de ellas mismas", ha añadido.

    El fotógrafo español Eugenio Recuenco fue su gran descubridor, ya que se enamoró de ella nada más verla y apostó por su imagen diferente. Desde entonces, ha posado para varios fotógrafos, ha sido imagen de campañas de publicidad y hasta ha desfilado en la Semana de la Moda de Nueva York.

    La joven tuvo una infancia muy difícil, sufrió malos tratos y se crió en un ambiente poco sano y lleno de agresividad, ya que sus padres tenían problemas con el alcohol. Ella siempre salió a flote gracias a una personalidad positiva y fuerte que la ha hecho afrontar cada palo que le ha dado la vida. Estudió Bellas Artes en el Pratt Institute de Nueva York y ama dibujar autrorretratos porque cuenta que le ayudan a aceptarse a sí misma.

    Pese a que siempre le han dicho que es un bicho raro, ella no se siente fea y es todo un ejemplo de que la diversidad puede ser realmente bella."Ahora soy modelo y actriz a tiempo completo y puedo viajar alrededor del mundo. Vuelo a diferentes países para hacer diferentes proyectos. Es realmente increíble", concluye.