David Delfín: Hiba Abouk, Pelayo y otros famosos despiden al diseñador
Informalia
El diseñador David Delfín fallecía este sábado en Madrid a los 46 años tras varios meses de lucha contra un tumor cerebral. El Museo del Traje de la capital fue el lugar donde se instalaron los restos mortales del modisto. Hasta allí se desplazaron cientos de amigos y rostros conocidos para darle el último adiós. Este lunes ya ha sido llevado a Marbella, donde será incinerado.
El cuerpo de David Delfín fue trasladado este domingo desde su piso, situado cerca del Palacio Real de Madrid, donde murió acompañado por su novio, Pablo Ráez. Ya en el Museo del Traje, se pudo ver al fotógrafo intentando mantener el tipo, aunque finalmente no pudo evitar romperse al recibir a su familia y amigos.
Hasta allí también se acercaron Gorka Postigo y Pelayo Díaz, antiguas parejas de David. A éste último se le vio muy afectado. Horas después de la capilla ardiente, el estilista de Cámbiame le daba el último adiós al "amor de su vida" en redes sociales.
Hiba Abouk, íntima amiga del fallecido diseñador, acudió en solitario para luego reunirse con otros amigos y compañeros de profesión como Paco León, Pepón Nieto o Rossy de Palma. Esta última estuvo muy pendiente de Charlie Centa, novio de Bimba Bosé e íntimo de Delfín.
Muchos de ellos llegaron con ropa y complementos de David Delfín, con el objetivo de homenajearle a través de su obra.
Rostros televisivos como Nuria Roca con su marido, Juan del Val, Belén Esteban, Topacio Fresh, Adriana Abenia, Carmen Lomana, Eva Hache o el actor Martín Rivas tampoco quisieron perder la oportunidad de despedirse del andaluz.
Compañeros del mundo de la moda como Modesto Lomba no pudieron reprimir las lágrimas ante las cámaras. Otros, más serenos, como el Ministro de Educación, Iñigo Méndez de Vigo, el productor Alberto Caballero o la cantante Leonor Watling también estuvieron presentes en un día tan duro.
Fueron muchas las coronas de flores que pudieron verse en los alrededores del Museo del Traje de Madrid. Una de ellas tenía el nombre de la familia Bosé, a la que el diseñador estaba tan unido. Dentro del recinto, globos de delfines en color rosa adornaban el féretro.