Barbara Rey admite sus citas íntimas con el Rey en un chalé del CNI
- "Era un lugar frío, desocupado y vulgar", dice sobre el lugar
Informalia
El CNI facilitó al Rey un chalé adosado en una zona residencial de Madrid para sus encuentros secretos con la vedette. Al parecer, la vivienda unifamiliar estaba destinada a ser un centro operativo para reuniones de alto nivel de los espías, sin embargo, se acabo convirtiendo en el nidito de amor del monarca durante tres años.
La propia Barbara Rey ha reconocido a OK Diario que visitó en más de una ocasión el chalé por petición expresa de Don Juan Carlos. La casa en cuestión está situada en el número 6 de la calle Sextante de Aravaca, en una zona próxima a la capital. "Era un lugar frío, desocupado y vulgar, y el frigorífico siempre estaba vacío", recuerda la actriz.
Para no levantar las sospechas de los vecinos, ambos accedían por separado al adosado por la entrada del garaje privado. Desde allí entraban a la vivienda mediante unas escaleras interiores.
El CESID, antigua denominación del CNI, contrató además una operaria doméstica, que se encargaba de mantener la casa en condiciones. La trabajadora recibía instrucciones de un agente, un guardia civil que usaba el nombre de Moreno, que la llamaba con antelación cada vez que la vivienda iba a ser utilizada. Sus encargos eran mantener la vivienda limpia, reponer algunos artículos del frigorífico, sobre todo fruta y champagne, y que nunca faltara crema Nivea y perfume de la marca Eternity del cuarto de baño. Otro operario se ocupaba del mantenimiento y de que funcionara la calefacción.
Bárbara también aclara a OK Diario que ese chalé no solo había sido habilitado, exclusivamente, para sus encuentros con el monarca emérito: "Iba otra gente. También conocida y de alto nivel", dice.
El CNI siempre ha negado esta versión, explicando que esta base operativa nunca fue utilizada para asuntos privados, y mucho menos para este tipo de cuestiones. Pero, por otra parte, ¿qué iban a decir?