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Samir Nasri, jugador del Sevilla, protagoniza un nuevo escándalo sexual
Informalia
El mundo del fútbol vuelve a protagonizar un nuevo escándalo sexual. Desde la cuenta de Samir Nasri, jugador del Sevilla, se tuitearon unos comentarios en los que se hacía referencia a unos encuentros que había mantenido con unas supuestas enfermeras en una clínica de Estados Unidos.
Todo sucedió en Los Ángeles. En futbolista de origen argelino acudió a la clínica Drip Doctors donde, según el propio centro afirmó en las redes sociales, sometieron a Samir a un "tratamiento de vitaminas para mantenerle hidratado y con buena salud de cara a su larga temporada con el Sevilla". El tuit de la clínica obtuvo una rápida respuesta por parte del jugador que no ha dejado indiferente a casi nadie: "También me proporcionasteis un servicio sexual completo justo después. Así que, chicos, aseguraos de pedir este servicio. Esa puta viene y te folla en la misma noche", escribió el protagonista de esta historia.
Y eso no es todo. Al parecer, su novia, Anara, había reservado habitación en la clínica con él y también disfrutó de algunos 'tratamientos': "Tengo que decirle al mundo que mi chica, Anara, estuvo conmigo cuando reservé el tratamiento. (?) Todos los servicios se incrementaron en mi habitación de hotel, pero tengo que avisar a los chicos que este servicio no se incluye en el menú", dijo Nasri.
La clínica en cuestión, Drip Doctors, está gestionada por las hermanas Sozahdah: Jamilah es la especialista en tratamientos con vitaminas, cosméticos y terapéuticos, mientras que Nooreya ocupa el puesto de directora de Marketing. Ambas son muy activas en las redes sociales, donde no dudan en lucir sus curvas en sensuales poses y presumir de sus diferentes operaciones estéticas.
Los hechos han puesto en una situación muy delicada al futbolista del Sevilla, quien se ha defendido asegurando que su cuenta ha sido víctima de un hackeo, ya que además de la mala imagen que puede dar al club y a su persona, ha activado las alarmas de la Agencia Antidopaje, para quien un tratamiento vitamínico inyectado podría suponer una grave infracción.