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Posada de Maravillas, el torero de los gays que escucha a Justin Bieber


    Informalia

    Tomó la alternativa en Zafra, Badajoz, hace sólo un año, y aunque aún no ha conseguido la gloria de maestros como José Tomás o Morante de la Puebla, Posada de Maravillas ya es todo un referente en el mundo del toreo. ¿La razón? Es el primer diestro que defiende la homosexualidad en las plazas. Este sábado, brindó su sexto toro en Las Rozas a David Enguita, el periodista amenazado de muerte el pasado mes de julio por retransmitir el Día del Orgullo Gay.

    Un gesto alabado por colectivos y criticado por algunos aficionados que al torero le salió del alma: "Muy contento de haber brindado el sexto toro de la tarde de ayer a David Enguita! Un amigo que lo esta pasado muy mal por defender la libertad y el amor. Todo mi apoyo!", dijo en su Facebook.

    No es la primera vez que Posada de Maravillas se manifiesta a favor del colectivo homosexual. En 2014, aseguró que el toreo necesita aficionados homosexuales: "Es un mundo algo machista y no toda la gente tiene una mentalidad abierta. En una fiesta abierta y culta es fundamental que formen parte de la afición. Yo tengo un montón de amigos gays y estoy encantado de que estén en el mundo taurino", unas declaraciones que levantaron ampollas.

    Y es que Posada de Maravillas no es un torero 'al uso'. Nació el Badajoz el 25 de febrero de 1994 y desciende de una larga dinastía de toreros. A los 13 años sintió la 'llamada del toro', pero fuera de la plaza rompe todos estereotipos. No le gusta la caza ni el flamenco, es más, reconoce sin complejos que, a sus 22 años, escucha a Justin Bieber y Miley Cyrus, aunque su artista favorito es Michael Jackson: "Aunque suene completamente loco, creo su forma de ser está muy ligada a la forma de ser de un torero. Michael era muy raro y los toreros somos muy raros en algunos aspectos. Debe ser eso de enfrentarnos cada tarde con la muerte", decía hace unos años a El Mundo.

    Además, Maravillas es un joven maniático (no soporta tirar la sal en la mesa), no utiliza reloj y dejó Twitter en agosto del 2015, cuando empezó a recibir amenazas de muerte: "A todos los que me de deseáis la muerte y os cagáis en mi madre, os digo que yo nunca lo haré. Siempre respetare a todo el mundo, besos", dijo en su último mensaje. Eso sí, es muy activo en Instagram, donde comparte imágenes con sus sobrinos, su perra Curra y su otra afición, la fotografía. Eso sí, de novias (o novios) ni rastro.