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Mireia Belmonte es de oro: abrazo con su padre y felicitación de su novio
- La nadadora se impone en los 200 metros mariposa
Informalia
La nadadora hizo historia durante la madrugada de este jueves (noche del miércoles en Brasil) al proclamarse campeona de los 200 metros mariposa en los Juegos Olímpicos de Río. La deportista de Badalona ha conseguido las dos únicas medallas de la delegación española por el momento. Después del bronce el pasado sábado, llegó la más especial: el oro. Un legendario logro que celebró con los suyos.
Tras el agónico final, quedó tres centésimas por encima de la australiana Madeline Groves, Mireia Belmonte (25) se fundió en un emocionante abrazo con su padre, José Belmonte, quien le entregó la bandera de España.
Su chico, el piragüista olímpico Javier Herranz, que llegó a la piscina justo para verla competir, también ha felicitado a la campeona en las redes sociales: "Sois el ejemplo de confianza ciega. Los dos sabíais que lo haríais. #Rio2016 #oro", ha escrito junto a una imagen en la que aparece Mireia abrazada a su entrenador, Fred Vergnoux, quien se mostró muy orgulloso del nuevo triunfo de la nadadora. "Dijo que iba a ganar y ha cumplido con sus palabras, eso es 'chapeau'", dijo y añadió: "Es que mañana se va a levantar y va a ser campeona olímpica para siempre, y eso es para toda la vida".
Belmonte, visiblemente emocionada, expresó sus sentimientos después de cuajar una final perfecta, con cuatro largos magníficos en piscina: "Este oro sabe diferente, es la recompensa a todo el trabajo duro de estos años", declaró. No obstante, ella quiere más: "No sé lo que siento, estoy en un momento muy raro, solo quiero relajarme para el 800".
La nadadora de oro quiso agradecer el apoyo de sus padres y su novio durante este tiempo, unos años en lo que se preparaba concienciudamente para sacarse la espinita de Londres 2012, donde no pudo subirse a lo más alto del cajón: "Sin ellos yo no hubiera conseguido el oro, han sufrido conmigo y todo esto es gracias a ellos".
Entre las felicitaciones recibidas, una de las más especiales ha sido la que ha llegado desde la Casa de Su Majestad el Rey.