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Silvio Berlusconi: su hija Marina toma el poder
- Manda al exilio a la novia de 'Il Cavalere' y 'vende' el Milán
Informalia
La primogénita del expresidente italiano celebró este miércoles su 50 cumpleaños rodeada de su familia en Villa Certosa, la famosa mansión donde en otro tiempo su padre organizaba escandalosas fiestas que salieron a la luz pública, provocando auténticos terremotos en Italia.
Fruto del primer matrimonio de Silvio Berlusconi con Carla Elvira Dall'Oglio, Marina Elvira es quien ha tomado el mando del clan Berlusconi en los últimos tiempos. Unos meses complicados para el político, que corrió el riesgo de morir debido a una crisis coronaria por la que fue intervenido. Fue en ese momento cuando su hija se encargó de gestionar los asuntos de la familia mientras acompañaba a su padre, alojada en la suite del hospital San Raffaele.
Tras superar la operación, Marina impuso a su progenitor nuevas reglas, entre ellas, el distanciamiento de la política y la eliminación de su círculo más íntimo, sobre quienes consideraba que le habían sometido a una presión extrema. La novia de Silvio, Francesca Pascale (31), se encontraba en el disparadero. El 5 de julio, mismo día que Berlusconi abandonaba el hospital, Pascale fue enviada a Villa Gamberini, una lujosa mansión que le regaló Il Cavaliere hace un año. La vivienda se encuentra a 15 kilómetros de la residencia de la familia Berlusconi en Arcore, por lo que Marina ha logrado su objetivo: distanciar a la novia de su padre. Aún así, estuvo invitada en la fiesta de cumpleaños. Dicen en Italia, no obstante, que pinta más bien poco.
La figura de su primogénita se ha agrandado estas últimas semanas con motivo de la venta del legendario club, A.C. Milan, el último gran símbolo de la era Berlusconi. Marina ha gestionado personalmente, en connivencia con su padre, la venta del conjunto rossonero a un grupo chino por 740 millones de euros. Y es que a su hija el fútbol solo le interesa si trae aparejado poder y riquezas, algo que el Milan, en completa decadencia deportiva, dejó de generar hace tiempo. De hecho, su mantenimiento le costaba al año entre 100 y 150 millones de euros.
"Con los 740 millones de euros, ahora Fininvest es más sólida", ha declarado Marina Berlusconi al diario Il Sole 24 Ore, en referencia a la poderosa posición de uno de los grupos financieros más importantes de Italia, presidido por ella misma desde 2005. Con esta venta, continúa en su misión de salvaguardar el enorme imperio familiar que su padre creó apoyado en la política.
En lo que respecta a su vida privada, Marina está casada desde 2008 con Maurizio Vanadia. Antes de pasar por el altar tuvieron a sus dos hijos, Gabriele y Silvio.