El Pequeño Nicolás: "En el despacho de Aznar me daba piquitos"

Este mismo viernes ocupa la contra de un periódico. En su día afirmó haber colaborado con el CNI, la Casa Real y Vicepresidencia del Gobierno pero acabó en GH Vip con Raquel Bollo y Rappel. Es un gran vendedor de sí mismo (literalmente) como demuestran sus exclusivas, programas de televisión, incluido su paso por la casa, y demás ventanas comerciales. Pero para el 'pequeño Nicolás' (Paco Gómez, en realidad) no todo es hacer caja: la petición de la Abogacía del Estado, en nombre del CNI, de 180.000 euros de multa, habría que ponerla en el 'debe' de este joven mediático y pintoresco, pero sobre todo ambicioso, uno de los nombres estrafalarios de la época decadente que vivimos.

Por ejemplo, después de salir de la famosa casa de Mediaset, el joven le sacó a la revista Lecturas 15.000 euros por una portada y una entrevista. Sobre su sueldo en el reality ya admitió que cobró 4.000 euros al día (¡!). En las dos semanas que duró su show Francisco Nicolás se embolsó 56.000 euros sin contar los platós y demás bolos posteriores.

Su paso por el programa incrementó aún más su patética pero inmensa popularidad. También su caché: cuando salió de la casa tenía en su móvil, que en teoría había estado apagado, 200 llamadas y unos 1.400 mensajes de Whatsapp. Su paso por el Sálvame Deluxe, por ejemplo, fue de los mejor pagados: se publicó que le habían ofrecido 25.000 euros.

Su caché por los clásicos bolos de discotecas es de 3.500 euros, aunque también ha tenido problemas: según ha sabido este portal, hace unos meses, en la puerta de un local de la calle Galileo de Madrid unos desconocidos le agredieron, aunque él quiso mantener el suceso en secreto.

Su actitud para algunos provocadora a veces es rentable de cara a algunos medios. Por ejemplo, en su primera entrevista concedida a una revista dejó frases como éstas: "El Gobierno me ha echado del programa". Sobre el Rey emérito dijo que "ha sufrido mucho por su amor a Corinna" o que ha regresado recientemente a Botsuana.

A la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, se le ocurrió meterse en este jardín. Afirmó que si el pequeño Nicolás fuera su hijo le llevaría al médico. La contestación no se hizo esperar: "A su edad es mejor que ella no se ponga minifalda ni se crea una niña de 15 años. Por su cargo tiene que dar seriedad. Que vaya ella al médico a mirarse el déficit, que parece una adolescente en celo", le espetó.

Este mismo viernes El Mundo le dedica su contra, donde regala joyas como ésta: "Me encantaría liderar un partido político. Pero hay que ser conscientes de la realidad: gano más que si me dedicara a la política", declara. "Seguramente gano más de medio millón de euros al año", calcula, aunque a la vez afirma no saber la cantidad exacta.

El Pequeño Nicolás presume este viernes en el citado medio de utilizar el despacho de Aznar para fines como mínimo curiosos: dice que cuando no estaba el expresidente en el despacho aprovechaba para enseñárselo a las niñas de su edad. "Era algo que ayudaba a ligar. En el despacho me daba piquitos, pero nada más. Era muy morboso. Me divertía un montón, le cambiaba las cosas de sitio y eso". Podemos no creerle pero hay que reconocerlo: se non è vero, è ben trovato.