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Beyoncé triunfa marcando escotazo en Barcelona

  • Congregó a 46.000 personas en el Estadi Olimpic

Informalia

La artista norteamericana reventó este el miércoles el Estadi Olímpic de Barcelona a base de potentes bailes y temazos en un show de dos horas que ha congregado a 46.000 personas llegados desde muchos puntos de la geografía española.

"Welcome to the Formation world tour", con estas palabras y emergiendo del suelo cual ave fénix salía una espectacular Beyoncé poco antes de las 22 horas en el estadio barcelonés. La puesta en escena consiguió dejar atónitos a los miles de asistentes a su show. Fuegos artificiales, efectos especiales, confeti e incluso una piscina se adaptaron en el centro del recinto para presentar el nuevo disco de la artista Lemonade en su único concierto en España y en la última de las 17 paradas de su gira europea.

'Queen B' comenzó con Formation, acompañada de un séquito de 15 bailarinas que seguían sus firmes pasos, junto a las que ha reivindicado sus rasgos negros en un show marcado de tintes reivindicativos contra la violencia racial y proclamas feministas.

La diva, embutida en un ajustado body negro de lentejuelas que marcaban su potente escote y con melena cobriza se movió sin cesar al ritmo de Bow down y uno de sus grandes exitazos, Run the world. Su vestuario negro se embelleció con un cambio al blanco al interpretar la melódica Mine. La cantante demostró, una vez más, que es capaz de bailar, posar, cantar al mismo tiempo al igual que hacer un guiño al público español al lanzarse a cantar a capella unas estrofas en castellano de su canción Irreplaceable.

Crazy in Love, aquel temazo que encumbró las grandes listas de éxitos hace 10 años, y Naughty girl llegaron al final de un espectáculo en el que también hubo un momento de homenaje a Prince, fallecido hace solo unos meses. La artista afroamericana más influyente del momento finiquitó con una emotiva y coreada Halo, que ha servido también para poner en la capital catalana el broche de oro de su gira europea, que empezó el 28 de junio en Reino Unido.