Gstaad acoge la boda del verano: se casa la hija de Abdul Rahman El Assir, íntimo del Rey

Alia María El Assir Fernández Longoria y Hugo Linares han decidido unirse después de pasar juntos casi toda su vida. El padre de la novia es Abdul Rahman El Assir, millonario libanés y empresario, relacionado entre otros negocios con el comercio de armas. La madre de Alia es María Fernández Longoria, hija de un diplomático español. Se ha publicado que los Aznar, Elena Cue, Isabel Sartorius o el mismo rey Juan Carlos asistirían al enlace. Pero no todo es cierto.

En Gstaad, la estación suiza más exclusiva, están acostumbrados a la presencia de millonarios del mundo entero que la han elegido como destino favorito para esquiar y celebrar grandes fiestas de Navidad. Allí reúnen el 31 de cada diciembre a sus amigos Ana Patricia Botín y su marido Guillermo ('Willy' Morenés), allí cenan juntos en la semana blanca Alicia Koplowitz y lord y lady Foster (Elena Ochoa).

En Gstaad cita Valentino a su amiga Naty Abascal para brindar por el nuevo año. Y en el pequeño pueblo suizo se queda confortablemente hasta la primavera Cristina Macaya, la socialité española por antonomasia.

Pero Gstaad también es destino veraniego. Lo será el próximo sábado para festejar la boda de Alia María El Assir Fernández Longoria y Hugo Linares Espinós, los dos licenciados en Derecho, y amigos y novios en Madrid, hasta que trasladaron su residencia a Suiza.

El padre de Alia es Abdul Rahman El Assir, millonario libanés y empresario, y del que se ha publicado que está dedicado entre otros negocios al comercio de armas.

La madre de Alia, María Fernández Longoria, es hija de un diplomático español y miembro de una reconocida familia.

La primera esposa de El Assir fue Shamira Khashoggi, hermana del famoso millonario saudí, considerado un traficante de armas y conocido por sus fastuosas fiestas marbellíes hasta que la justicia norteamericana lo metió en la cárcel.

Shamira se casó más tarde con el que fuera dueño de los famososo almacenes Harrods de Londres, Mohamed Al Fayed. Uno de los hijos de este matrimonio fue Dodi Al Fayed, amante de Diana Gales, junto a la que falleció en el trágico accidente del Puente del Alma de París el 31 de agosto de 1.997.

El Assir y María Longoria estuvieron casados casi 30 años y tuvieron su residencia en Madrid, donde han seguido sus tres hijos Alia, Khalidia y Adil.

Este último estudia ahora en una Universidad americana, como su novia desde hace tres años, Mancía Fitz-James Stuart Sartorius, hija de Isabel Sartorius y de Javier, que cuando nació su hija se apellidaba Soto pero cambió más tarde el orden de sus apellidos al convertirse en heredero de su tío el duque de Peñaranda, millonario y soltero.

En España, El Assir se hizo muy amigo del rey don Juan Carlos, con quien cazaba o intercambiada opiniones políticas y económicas. Se ha dicho que el rey emérito irá a la boda de Gstaad pero fuentes cercanas a la novia aseguran a Informala que lo consideran "poco probable".

Tampoco irá Jaime de Marichalar, muy amigo de las hermanas Longoria, madre y tías de la novia, con quienes comparte veraneos en Sotogrande. Jaime de Marichalar almuerza el sábado en Madrid con su hijo Felipe (conocido como Froilán), que el mismo día de la boda cumple 18 años. "Nos ha dicho que le resultaba imposible acudir aunque le hubiera encantado. Pero entendemos que su hijo, al que adora, y que ese día es mayor de edad, es lo primero".

Como tampoco ni asistirán ni estaban invitados Elena Cué y Alberto Cortina. "Es una boda familiar y de amigos jóvenes", confirman nuestras fuentes. "Se han escrito algunas inexactitudes: tampoco creemos que vayan Aznar y Ana Botella", no explican.

Otra invitada que había confirmado su asistencia y sin embargo no estará en Suiza, es Isabel Sartorius. "Nos dijo que sí, que sí, que vendría, y luego ha anulado. Ella es así. Pero su hija Mencía estará sin duda con Adil, su pareja y hermano de la novia", aseguran a Informalia.

También nos desmienten que vaya a ser una boda de las mil y una noches, como también se ha comentado. "Es una fiesta de gente joven que va a divertirse. Ahora está de moda que las bodas duren varios días y no sólo entre parejas adineradas".

La víspera habrá una cena en el hotel Palace de Gstaad, el sábado, la ceremonia católica (nada de boda paralela por el rito musulmán). Y el domingo un brunch de despedida.

Tampoco el aeropuerto de Gstaad se llenará de aviones privados de los invitados. El vienes, un chárter viajará de Madrid con los asistentes españoles, fletado por el padre de la novia. Un detalle de padre con amor y poderío.