Belleza

Kim Kardashian: así es su dieta


    Informalia

    Para estar bella hay que sufrir... o pasar por el quirófano y gastarse un dineral. Bien lo saben las celebrities que se cuidan, se aplican tratamientos de belleza y se someten a duros entrenamientos y dietas para estar siempre perfectas. La última que ha compartido su secreto para estar ideal ha sido Kim Kardashian, que tras su segundo embarazo engordó 30 kilos y ahora está aún en fase de adelgazamiento.

    ¿Qué dieta sigue la mujer de Kanye West? Se trata de la conocida como Dieta Atkins o baja en carbohidratos. Una de las razones por las que es efectiva es porque cuando uno elimina los carbohidratos, elimina también el hambre. Si la tienes, esta dieta te permite comer tanto como desees, pero sólo los alimentos que están permitidos para el nivel en el que estés en la etapa de tu dieta (hay cuatro niveles).

    El primer combustible que quema tu organismo para obtener energía proviene de los carbohidratos que tú comes y bebes. Si dispone de algún carbohidrato, tu cuerpo lo quema en lugar de quemar la grasa almacenada.

    Así que, cuando no se toma ningún carbohidrato, tu cuerpo debe recurrir a la principal reserva de combustible, la grasa, y empiezas a bajar de peso en 48 horas.

    La celebrity puede perder con esta dieta de dos a cuatro kilos cada semana y se puede permitir el lujo de comer productos como carne, mayonesa, nata, queso o pescado. Además, no excluye ni frutas, ni verduras ni las semillas o granos.

    Las cuatro fases de la dieta Atkins son:

    1. Introducción. Inducción de duración de dos semanas, es el punto de partida para bajadas de peso de más de 18 kg.

    2. Bajar de peso de manera continua. De cuatro a seis semanas, es el punto de arranque para bajar hasta 9 kg.

    3. Mantenimiento previo. De cuatro a cinco semanas, está ideada para bajar tus últimos 4,5 kg.

    4. Mantenimiento. Consiste en aprender a mantener tu peso ideal durante toda tu vida.

    Como todas las dietas, debe estar supervisada por un experto en nutrición, ya que no es recomendable para todas las personas. Además, sólo un especialista podrá evitar el temido efecto yoyó que se puede sufrir al volver a introducir los carbohidratos en tu alimentación diaria.