La mujer de Pedro Sánchez ya se veía de primera dama: "Nos vemos en Moncloa"

El líder socialista no ha conseguido formar gobierno, por lo que ya se prepara para unas segundas elecciones que, según las encuestas, pueden acabar en tragedia para el PSOE. La decepción es mayúscula en su círculo cercano. Una de las más afectadas es su esposa Begoña Gómez, quien ya se veía de primera dama, tal y como revelan amigos íntimos del matrimonio.

"Nos vemos en Moncloa", decía tras las cámaras la mujer del político en los debates televisivos durante la pasada campaña electoral, según relatan algunos miembros de la Academia de Televisión a La Razón.

Y es que Begoña ya ultimaba los detalles para mudarse a la sede presidencial. "Ha pasado de estar preparada para La Moncloa a decepcionada por no llevar un cambio de estilo", asegura su entorno, también decepcionados después de que Pedro Sánchez no haya conseguido ser investido presidente del Gobierno. 'Los Obama españoles', tal y como se le conoce en el equipo de Sánchez, tendrán que esperar un milagro para lograr su objetivo.

Desde su salto a la fama, Begoña Gómez ha experimentado una gran transformación. Aunque se presentaba como la discreta y tímida esposa del líder del PSOE reacia, incluso, a pisar la casa que otrora fuera de José Luis Rodríguez Zapatero o José María Aznar, tan solo un año después de la presentación oficial de su esposo en la carrera electoral, Begoña parece otra. Sonriente, amable, divertida, espontánea y siempre presente, la vasca, de 40 años y madre de dos hijas, se ha convertido en la sombra de Sánchez, quien siempre cuenta con su apoyo desde la tribuna. Así sucedió durante el Debate de (no) investidura, cuando Begoña acompañó a su marido al Congreso de los Diputados, en uno de los días más importantes de su carrera política.

A pesar de que por el momento sus planes no han salido como ella esperaba, desde su entorno confiesan que no ha tirado la toalla y todavía apuesta por su marido. "Cariño, el paseo hacia La Moncloa no ha terminado", le dice Sánchez.