Carmen Chacón: el 'no cáncer' y otras 'puñaladas' a la ex ministra que ya no quiere ser diputada

Decía la ex ministra este jueves que dejaba el Parlamento "por motivos políticos" pero no quiso concretar por qué no se presentaría a diputada en las elecciones de junio. El paso atrás de Chacón supone que no sera diputada en la próxima legislatura pero no el abandono de la política ya que seguirá en la ejecutiva del PSOE. Hace un mes le adelantó su decisión al ex presidente Zapatero y el miércoles se lo dijo al primer secretario del PSC y a Pedro Sánchez. Nada más hacerse pública la decisión de la ex ministra de Defensa, Miquel Iceta daba a entender en unas declaraciones que la marcha se debía a un asunto relacionado con la salud.

En concreto, el presidente del Grupo Socialista en el Parlamento de Cataluña dejaba caer en la mañana de este jueves que Carme Chacón no se presentaría a las próximas elecciones a causa de una enfermedad: "Ya sabéis que tiene también un tema de salud", decía Iceta. "Su vida no ha sido sencilla, a veces se ha presentado como una cosa lineal y sencilla y no ha sido así", explicaba el líder catalán. "Si renuncia a estar en las listas no es porque renuncie a pelear, ella es una luchadora, es porque considera que en este momento tiene otras cosas que hacer y en las que pensar".

Estas palabras deslizadas por Iceta Iceta para explicar los porqués de la espantada de la ex ministra de Zapatero dispararon las alarmas sobre un posible cáncer que estaría sufriendo Chacón. A tal punto que la propia parlamentaria tuvo que salir al paso. Afortunadamente, tras el inoportuno error de Iceta, se impuso la verdad porque sencillamente es mentira que Chacón sufra un cáncer. "Nadie sabía nada", nos decía una periodista que trabaja a diario muy cerca de la ministra cuando le preguntamos sobre las insinuaciones de Iceta. Como que es mentira.

Es cierto que Carmen Chacón sufre una cardiopatía, pero hace mucho tiempo, con la que ha sido madre, ministra de Defensa, profesora, parlamentaria, etc., pero nada que ver con las inexplicables insinuaciones que llegaron del 'jefe' de los socialistas catalanes y que, por cierto, ha sido duramente criticados desde algún medio por lo que consideran una puñalada de quien estaría detrás de los "motivos políticos" aludidos por la ex ministra para no volver al parlamento, aunque seguirá en la Ejecutiva del PSOE.

No es el primer paso atrás de esta política catalana que soñaba con ser la presidenta del Gobierno. Pero todo el mundo, hasta el propio Iceta, coincide en que es una luchadora. Supo ser ministra de la crisis, combatió la etiqueta de muñequita de Zapatero y otras cosas. Su marido es el influyente Miguel Barroso (ex de la periodista Charo Izquierdo), y su vida personal pasa por su papel de esposa y madre. Cuando salió del Ejecutivo socialista, antes de su etapa en Estados Unidos, confesó que dormía más y que se tomaba algún mojito. Ero a la exministra de Defensa, le había costado hasta ahora desprenderse del hábito de política. Aunque a alguno sí ha ido, no le gustan mucho los saraos. A sus 45 años, aún se la recuerda siendo una treintañera y pasando lista a las tropas embarazadísima al grito de Viva el Rey.

Para ilustrar su postura política como catalana lo mejor es recuperar alguna declaración suya: "Mi marido es aragonés y yo soy catalana, ¿qué hago? ¿pongo un muro en mi casa?". Tal vez esta sorna que gastaba hace años le haya llevado por el camino de salida; lo que posiblemente no se esperaba es que alguien tratara de despistar sus discrepancias aludiendo a un tema tan delicado como la salud, y más siendo mentira. "Soy más de sumar, que de restar. Para mi madre soy Carme, y para mi padre soy Carmen", suele repetir Chacón cuando se le pide que se moje con la situación catalana.