Muere Elena de Borbón Barucci, la amiga española de Versace

Prima de don Juan Carlos, madre de cinco hijas y viuda del más pequeño de los Garrigues Walker, Elena fue ante todo una relaciones públicas de primer nivel en el mundo de la moda, la mujer de Versace en España en su época de máximo esplendor, siempre en los primeros puestos de las más elegantes. Un alzhéimer precoz le robó los recuerdos a finales de los 90. Todo el mundo hablaba bien de ella.

Elena de Borbón Barucci, prima segunda de don Juan Carlos, falleció el pasado fin de semana rodeada de su familia. Hace un cuarto de siglo fue muy famosa: era la Relaciones Públicas de Versace en España. Ella representó a la medusa de Gianni en su época más creativa, cuando los 90 parecían la cima de la modernidad. Su enfermedad, un alzhéimer precoz que aturdió su memoria con sólo 50 años, la apartó del mundo durante tres lustros, los que ha permanecido al cuidado de sus hijas en su residencia de Puerta de Hierro.

Elena de Borbón Barucci era una mujer bella y con clase, pero también una proofesional capaz, determinada, trabajadora y pionera. Se casó con José Miguel Garrigues Walker, con quien tuvo cuatro hijas (tenía otra de una relación anterior). En los desfiles de París del otoño de 1998, Elena se perdió por una ciudad que conocía perfectamente. Y no sabía volver a su hotel, ni dónde estaba. Algo sucedía en su cabeza. El psicólogo Pedro Simón le dedica en Memorias del Alzhéimer uno de sus relatos, en el que explica cómo comenzó Elena a darse cuenta de que tenía esta enfermedad y la define como vital, hiperactiva, enérgica, despistada, afectiva, animal y poliédrica". Tal vez más que hiperactiva era muy trabajadora: Elena, después de pasar por la firma Rodier, introdujo a Versace en nuestro país. Vistió a las señoras de la alta sociedad pero también se ocupó de otorgar a la marca que representaba un aire de modernidad. Isabel Presyler vistió los modelos de la marca, pero también se encargó de que Bibi Andersen (hoy Bibiana Fernández) llevara ropa de Versace en películas de Almodóvar.

 En la imagen de abajo, tomada en mayo de 1991 durante la entrega del premio Aguja de oro a Versace, aparecen de izquierda a derecha: Isabel Presyler, vestida de Versace; Yolanda Fierro (de sí misma), María Rosa Salvador de Ungaro, Gianni, Elena de Borbón, de Versace por supuesto, Marisa Borbón de Loewe (siempre ha trabajado para Loewe) y la periodista Lola Gavarrón, con chaqueta de Pedro del Hierro.

En 1986, Elena declaraba a la revista Diez Minutos: "Cuando una mujer trabaja fuera de casa, aprende a organizarse mejor y a llevar una vida más sana". En aquel otoño de hace casi 30 años posaba vestida de Dafnis con tres de sus cinco hijas. Fue personaje de semanarios como Hola o Diez Minutos y también ocasionalmente ejerció de modelo para revistas especializadas como Telva, Marie Claire, Elle o Vogue, siendo retratada por fotógrafos como Sylvia Polakov en su propia casa. La conocida retratista contaba una anécdota en la embajada de Italia con Gianni Versace: "Gianni quería conocer lugares canallas y peligrosos de Madrid. Y como yo era tan noctámbula, Elena se levantó y vino directamente a preguntarme a mí. Era mágica, sabía qué preguntar a cada cual y cómo preguntarlo", recuerda.

La revista Hola la fotografiaba en junio de 1980. En la lista de las más elegantes que el semanario ya elaboraba, Elena ocupó entonces el segundo puesto, dejando el primero, casi a título honorífico, a su prima política, la reina Sofía. Detrás de Elena de Borbón completaban aquella lista: Bibi Salisach de Samaranch, la marquesa de Griñón (o sea, Isabel Preysler) y Charo Palacios, condesa de Montarco. Elena se mantendría durante años en el 'top 10'.

Su hija Carla Garrigues de Borbón (en la fotografía de arriba, en una imagen sin datar, durante unos desfiles en Milán), declaraba que su madre estaba "enamorada de su marido hasta la médula" y añadía que era "muy compañera". Aunque no con todo el mundo se llevó bien. Dicen que Donatella, la hermana del genio Versace, la odiaba. Katia Guerrero, muy amiga de Elena, decía que era "mágica, eclipsaba y dominaba toda la escena. Era puro charm y elegancia sin estridencias, creo que por ese motivo Donatella la odiaba porque Elena era cero Donatella: cero vulgar, cero ordinaria y claro, a Gianni se le caía la baba. La adoraba, la idolatraba, se deshacía con Elena y eran verdaderos amigos", relata.

Katia recuerda el día que llamaron a Elena para comunicarle la muerte de Gianni: "Yo estaba con ella, curiosamente en una tienda de ZARA, y aquella tarde de verano de 1997 no la olvidaré jamás porque recuerdo a Elena rota ante la noticia, tanto que llegó a desmayarse".

Su hija Carla contaba en una entrevista cómo era su madre trabajando: "Me quedé impactada de verla en acción con toda la prensa española, que la adoraba. Creo que no hay nadie que no diga cosas bonitas de Elena, mi madre, una persona llena de amor, es lo que mejor puede definirla. Supo hacer las cosas bien, en una época en la que trabajar y cuidar de cinco niñas, no era fácil. Le cogió por sorpresa, a ella y a todos los que la rodeábamos una desgraciada enfermedad que borró sus recuerdos". Para Carla, su madre era "como una luz elegante, discreta, divertida, disfrutona, perfeccionista, estética, guapa, exquisita, no dejaba indiferente a nadie? Enamorada de su marido y de sus hijas, apasionada en su trabajo. Pasión, que me inculcó a mí", decía con sentimiento no hace mucho cuando aún su madre estaba entre nosotros.

Ser madre de cinco hijas que la adoraban y trabajar duro no le impidió sin embargo vivir una verdadera historia de amor con su marido. Pero su matrimonio, herido ya desde que ella perdió la memoria, se acabó para siempre el 23 de agosto de 2004. Hacía unos seis años que Elena había comenzado a perder sus recuerdos cuando su marido, José Miguel Garrigues Walker, falleció en Madrid a los 64 años tras una larga enfermedad. Michu, como le llamaban sus seres queridos, era hijo del jurista Antonio Garrigues y Díaz-Cañabate.

José Miguel, economista que había estudiado Madrid y Barcelona, Harvard y Georgetown, era el más pequeño de los Garrigues Walker, hermano de Joaquín, ex ministro de UCD que falleció en 1980 a consecuencia de una leucemia, y del conocido abogado Antonio Garrigues. Cuando falleció hace ya once años era era consejero de la SER y presidente de Liga Financiera. También había sido presidente del Banco de Levante.