Fran Rivera ahora es bloguero

El diestro sigue los pasos de su mujer, Lourdes Montes, y se convierte en nuevo bloguero de la web de la revista. Bajo el título Las cosas mías, el torero pretende compartir con los lectores sus puntos de vista, sus vivencias y sus opiniones "sin intermediarios" sobre las cosas de su vida y de la sociedad. Solo "cosas buenas", apostilla.

En su primer escrito en ¡Hola!, Francisco Rivera comienza dejando claro su objetivo con este blog: "No vengo a dar lecciones ni muchísimo menos, quizás consejos a lo sumo", dice y añade: "Sé lo que es que la señora muerte ronde por tu ventana y eso te da una forma distinta de ver la vida, de afrontar los problemas".

El torero repasa los momentos en la UCI tras la aparatosa cornada sufrida en Huesca. "Cuando te despiertas en la U.C.I y te das de bruces con esa realidad, tu mundo se hace pequeño, muy pequeño, para darle importancia solo a lo que de verdad la tiene: mis hijas, el miedo a no haber conocido a una de ellas, mi mujer, la familia y amigos que de verdad se preocupan por ti".

Fran se muestra orgulloso de pertenecer a la familia Rivera Ordóñez: "Mi familia es muy peculiar, pero somos de una raza especial, forjados a golpe de fragua y algunos merecen la pena, y me llena de orgullo ser Rivera Ordóñez Dominguín. Mi familia política es un ejemplo de amor y unidad, estoy feliz de pertenecer y formar parte de ella, es lo mejor que nos ha pasado, a mí y a Cayetana". Al tiempo que se congratula de los amigos que tiene, "esos hermanos que uno escoge".

Una de las partes más importantes de su primer texto es la que se refiere a su mujer, de la que se acordó cuando despertó en el hospital de Huesca: "Al despertar en la U.C.I, pensé? 'Necesito mil vidas para darle a Lourdes todo el amor que siento por ella'. Lourdes es mi timón, mi luz, mi compañera, es a quien quiero siempre a mi lado y yo estar al suyo. Desde que la conocí, que fue un flechazo, ha conseguido que cada día me enamore más y más de ella. El cómo llevó todo ese momento tan delicado embarazada de ocho meses y medio, con qué entereza, con dos cojones y con esa cabeza privilegiada que le ha dado Dios. Demostró otra vez la clase de mujer que es, esa mujer de verdad, de una pieza, con un corazón que no le cabe en el pecho. Vamos, que no me creo el despertarme cada mañana a su lado, es lo más maravilloso que puedo soñar".

Sus hijas, Cayetana y Carmen, forman otra de las partes más importantes de su vida. Para ellas tiene unas sentidas palabras en el estreno de su blog: "Nunca un padre ha estado tan orgulloso de un hijo como yo de Cayetana. Es noble, tiene arte, de tonta ni un pelo, lista como los ratones coloraos, es mujer de raza. Además hemos vivido cosas juntos que nos dan esa complicidad tan especial que hay entre nosotros. Sé que va a ser una gran mujer, solo espero poder estar el día que tropiece para ayudarla a levantarse y animarla a que siempre persiga sus sueños y a que luche por ellos", dice sobre su hija mayor.

Respecto a la recién nacida Carmen, el torero cree que ha arribado en el momento perfecto: "Ha llegado en un momento maravilloso a una familia perfectamente encajada, a una casa llena de amor y alegría. Ya se le empieza a descubrir su carácter, su simpatía. Cuando sonríe ilumina toda la casa y nos peleamos por cogerla. Sin duda, ha llegado con un pan debajo del brazo".