El mercado ha apartado, por el momento, la preocupación por la guerra comercial entre Estados Unidos y China para centrarse en la temporada de resultados corporativos que está a punto de comenzar en el país americano.
Por eso, y antes de que los grandes bancos den el pistoletazo de salida a las cuentas de resultados trimestrales (mayoritariamente del segundo cuarto del ejercicio), el Dow Jones ha firmado su mejor sesión desde hace más de un mes con un repunte del 1,31% hasta los 24.776 puntos. Por su parte, el S&P 500 se ha anotado un 0,88% y se queda en los 2.784 enteros mientras que el Nasdaq se sitúa a menos de 5 puntos básicos de lograr volver a máximos históricos tras sumar un 0,95% hasta los 7.276 puntos.
Este índice "ya consiguió el viernes batir las resistencias que encontraba en los 7.200 puntos, donde semanas atrás generó un amplio hueco bajista", explica Joan Cabrero, "con lo que la posibilidad de ver mayores caídas en el mercado norteamericano se aleja considerablemente", añade.
"Lo más destacable de ayer fue ver como el Nasdaq Composite también consiguió cerrar ese hueco, algo que no había logrado el viernes, lo cual es una clara señal de fortaleza que invita al optimismo", continúa Cabrero.
"El cierre de estos huecos bajistas en los índices tecnológicos es una clara señal de fortaleza que plantea la conclusión de la última fase de consolidación y abre la puerta a que el Nasdaq 100 pueda retomar su impecable tendencia alcista, que encaja con la hipótesis que venimos defendiendo de que aún deberíamos ver mayores alzas, hacia el techo del canal alcista que viene acotando las subidas del principal índice tecnológico durante los últimos meses, que aparece actualmente por los 7.600-7.700 puntos", concluye el experto.
La mirada, por lo tanto, vuelve a estar en las compañías y no tanto en el entorno macro. El mercado espera que, contando con el efecto de la reforma fiscal de Trump, sigan batiendo las expectativas en torno a sus beneficios como ya sucediera en el primer trimestre.
Por otro lado, el petróleo ha vuelto a cotizar con ganancias superiores al 1% recuperando así la cota de los 78 dólares por barril de Brent.