Las materias primas están consolidando su recuperación después del ocaso que vivieron entre finales de 2015 y mediados de 2016. Ahora, con el petróleo por encima de los 60 dólares y los metales industriales en máximos de 2014, parece que vuelve a salir el sol en el mercado de commodities. Los precios de estas materias suelen ser uno de los principales catalizadores para el crecimiento económico mundial, debido a su importante influencia en sectores clave como el industrial o el energético.
El índice Bloomberg Commodity recoge los precios de una cesta ponderada de materias primas y, a media sesión de ayer, sobrepasaba los 87,5 puntos, niveles no vistos desde marzo y con los que se borran las pérdidas de todo el año, que llegaron a ser de más de un 9%. Desde esos mínimos, alcanzados en junio, el indicador de la agencia norteamericana rebota un 10%. Dentro de esta cesta, la que más pesa es el oro -11,5%-, seguida del cobre -8,8%-, petróleo Brent -8,1%-, gas natural -7,1%- y crudo West Texas -6,9%-.
En el caso del cobre, ha llegado a superar la barrera de los 7.000 dólares por tonelada métrica tras avanzar más de un 25% este ejercicio. Desde ETF Securities esperan que "los metales industriales, entre ellos el cobre, sigan revalorizándose ante la contínua reducción de la oferta, los déficits plurianuales y la mayor demanda de China".
Además del petróleo y los metales industrales, también avanzan otras commodities. "Ha habido distintos eventos geopolíticos, además de las tensiones entre Estados Unidos y Corea del Norte, que han impulsado el precio de los metales preciosos, como el oro o la plata", apuntan desde UniCredit. El oro, activo refugio por excelencia, se anota más de un 11% desde el primero de enero, aunque en septiembre llegó a tocar máximos de mediados de 2016 en el entorno de los 1.350 dólares por onza. "Además, el alejamiento de las subidas de tipos en Europa, así como en EEUU –finalmente sólo habrá tres este año frente a las cuatro que se vaticinaban en el primer trimestre–, ha propiciado las compras de oro como una inversión más rentable y segura que la deuda soberana", concluyen desde UniCredit.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se reunirá el próximo 30 de noviembre para decidir si prolonga el recorte de la producción que anunció en 2016. El mercado ha comprado que así será y, de hecho, desde el acuerdo, el precio del barril de Brent ha repuntado un 37% hasta los 63 dólares, niveles no vistos desde junio de 2015. "El último impulso ha tenido como protagonista a Arabia Saudí, que podría estar presionando al alza su precio para no deslucir la salida a bolsa de Aramco", arguyen desde Self Bank.