Solo el Banco de Inglaterra (BoE) puede evitarlo. Pero lo tiene difícil. Si este jueves decide recortar los tipos de interés y reactivar los estímulos monetarios o advierte de que lo hará en los próximos meses, los analistas no dudan en que la presión bajista se elevará sobre la libra. "El objetivo último de los descensos para su cruce con el dólar está en los mínimos de 1985", advierte Carlos Almarza, estratega de JM Kapital y analista de Ecotrader.
Es difícil saber si la sangre llegará tan lejos, pero lo cierto es que la principal víctima del Brexit, la divisa británica, vuelve a estar en el disparadero. Únicamente un giro en los acontecimientos que incluyera un menor impacto de la salida de Reino Unido de la Unión Europea en la economía, respecto a lo que ya se puede intuir según indicadores como los PMI, o un mensaje tranquilizador del BoE pueden saciar la sed bajista de los inversores.
Un cambio de guión improbable. "Esperamos que este jueves el Banco de Inglaterra amplíe su programa de expansión cuantitativa, y no nos sorprendería que incluyera una gran variedad de activos a su programa de compras", aseguran desde Legg Mason. Una opinión que comporte el 97,8% de los expertos encuestados por Bloomberg, los cuales, coinciden en señalar que recortará en 0,25 puntos porcentuales los tipos de interés, desde el 0,5% en los que se encuentran actualmente.
"Los argumentos a favor de que el BoE amplíe los estímulos son claros", explica el equipo de analistas de Bank of America, que considera, además, que debe poner toda la carne en el asador, ya que "lo peor que podría suceder ahora es que los estímulos no funcionaran". "Los pocos indicadores disponibles confirman sobre todo el escenario de un impacto negativo significativo, especialmente en la inversión, en las contrataciones de las empresas y en el sector inmobiliario", señalan Iván Díez Sainz y Álvaro de Liniers, analistas de Groupama.
"Los datos 'oficiales' del efecto del Brexit no se conocerán hasta finales de agosto pero el Banco de Inglaterra no puede esperar tanto tiempo antes de actuar, teniendo en cuenta las contracciones de los indicadores avanzados", continúan los expertos de la firma de inversión. "La política monetaria necesita tiempo para incidir en la economía, por lo que si se espera hasta conocer exactamente las consecuencias, será demasiado tarde", concluyen desde Bank of America.
La postura de las firmas de inversión alerta, entonces, de que la divisa británica difícilmente podrá librarse de otro aumento de la presión bajista después de caer cerca de un 11% frente al dólar desde el Brexit y un 9% en lo que va de año. En Ecotrader, existe una estrategia bajista abierta sobre el par libra/dólar desde principios de mayo que se ha aprovechado de esta tendencia y que gana un 10%.
"La tendencia bajista se mantiene plenamente vigente, lo que invita a mantener la operativa confiando en un contexto de mayores caídas en las próximas semanas", comenta Carlos Almarza, analista del portal premium. "Desde el entorno de los 1,30/1,29 dólares sobre el que cotiza actualmente no es extraño que intente formar un rebote, que consideraríamos vulnerable, y que lo más probable es que sea previo a nuevos descensos", afirma el experto.
De cara al cierre del presente trimestre, el consenso de mercado que reúne Bloomberg cree, de media, que caerá hasta las 1,27 dólares. Entre las casas de análisis que emiten previsiones sobre el cruce, Julius Baer, que lo ve en 1,16 dólares es el más pesimista. Ya en 2017, hay firmas de inversión como Bayerische que sitúan al par en 1,07 dólares, cerca del objetivo último, según el análisis técnico, que señala Carlos Almarza.